León Ferrari
Las obras que están expuestas pertenecen a la serie Heliografías del artista plástico León Ferrari y son parte de una gran donación que hiciera el maestro al MAC de la UNL en el año 2007.
Fueron cuatro series las incorporadas al Patrimonio del Museo por parte del artista en aquel año, siendo la serie Heliografías de una unidad visual contundente en su relato estético, determinado por la fuerza de la reiteración.
Estas obras que fueron realizadas en la década del 80, cuando el artista estaba exiliado en San Pablo, Brasil fueron producto de agudizar su ingenio para encontrar un material de bajo costo y que lo representara, es así como el papel heliográfico fue el recurso que le dio la oportunidad de expresarse visualmente y utilizar como estrategia compositiva la reiteración, la repetición una y otra vez de cada una de las figuras que arman la escena.
Se ve claramente en estas obras la opresión que resulta de la convivencia urbana en una metrópolis, la masificación, el sometimiento a un sistema brutal.
El inmenso universo que combina un cierto hacinamiento con una arraigada desesperanza, determina a su vez, claramente el desarrollo de la condición humana en estas situaciones.
Una masa social uniforme que no da pie a las diferencias y se complejiza en la igualdad, en la sometida uniformidad de una convivencia ordenada. Anudados de autopistas irreales, con cruces imposibles, estructuras constructivas en el plano donde personajes y objetos están invertidos, rotondas y cuadrículas con multitudes aglutinaciones de personas y objetos, así aparecen camas, inodoros, automóviles, puertas, creando una nueva escena, una realidad tanto opresiva como ingenua e hipotética y tan contradictoria como inverosímil.
Son otras de las manifestaciones de un grafismo que será parte de toda la historia visual de León Ferrari. Siempre apeló a la yuxtaposición, a la cartografía constructiva y a los avances y retrocesos de la línea en superpuestos enredos, dando una especie de trama gramática de manuscritos de letras, números y objetos que, agrupados, fueron definiendo por acumulación sus conocidas imágenes.
Las heliografías son un producto obligado de su período de exilio y son parte de la recurrencia de su relato visual en otro formato y en otro soporte. En definitiva el MAC esta poblado de “auténticas” obras de León Ferrari que fueron una oportunidad de expresión impensada para ese material, en los años 80 cuando fueron realizadas.
Rígidas estructuras condicionan el devenir del orden pautado y sin salida, de las multitudinarias urbes contemporáneas donde se reflejan la cuadrícula, el espiral concéntrico, la simetría axial y otras formas que contienen el hormigueo urbano y sus consecuencias en la vida de los hombres.
León Ferrari convierte otra vez en un documento de acción a estas obras, en una herramienta para la manifestación de opiniones y en estas construcciones y organizaciones espaciales planteadas en el plano, nos deja ver una vez más el sometimiento en el que se ven implicados los hombres de nuestro mundo.
Lic. Stella Arber
Directora del MAC