Medicina forense

Quemacoches: "Debe encararse como un fenómeno complejo"

Lunes 3 de octubre de 2016 / Actualizado el sábado 8 de octubre de 2016

Los hechos parecen no tener un resolución satisfactoria, quizás porque deben estudiarse de otra manera. Qué nos dicen casos como los de Colombia y Francia.

Para el médico forense Pascual Pimpinella, de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), los hechos son encarnados por actores con características muy dispares entre sí, por lo cual deben encararse desde la complejidad que suponen.

Según el docente de Medicina Legal, Social y Laboral de la Facultad de Ciencias Médicas (FCM) de la UNL, la Justicia debe investigar el fenómeno desde la inteligencia y respondiendo a un reclamo social. “El problema es que aquí no hay un reclamo social, la sociedad santafesina ha naturalizado el hecho. Los coches se queman y ya hay un costumbrismo”, lamentó.

“Por otra parte, si tuviera que hacer una predicción, yo diría que es probable que el fenómeno pase y nadie se ponga investigar las causas, el fenómeno en sí. También debemos cuestionarnos por qué nos pasa a nosotros y no en Paraná, en Buenos Aires o en otro lugar, una pregunta que sólo se puede responder desde la investigación científica”, apuntó el médico, que también es forense en el Poder Judicial santafesino.

Compulsión, sociopatía e intereses

Para Pimpinella, el fenómeno debe estudiarse en el marco de su fin, respondiendo al porqué se queman los coches. “¿Se debe a una conducta que da placer? Si es así, estaríamos hablando de alguien con una personalidad obsesiva compulsiva. Sin embargo, la estadística indica que la población que padece ese trastorno mental es cerca del 2 al 3 por ciento. Es muy baja”, indicó.

En este sentido, sostuvo que antecedentes similares, los de Colombia y Francia, sólo pueden entenderse desde la protesta social. “En esos países había grupos o tribus que estaban en contra de ciertas acciones de sus gobiernos y que por eso se manifestaban. Lo significativo es que estaban identificados. Sin embargo, en Santa Fe no sucede que alguien se atribuya las quemas como una acción de protesta. Entonces, de ser una sociopatía tiene esta debilidad de la no identificación”, enfatizó.

Una tercera opción relacionada con la quema de los coches para un fin es la de los intereses particulares con el objetivo de alguna reparación: “Podría ser para tener un resarcimiento económico, como el de cobrar un seguro, o bien como parte de una venganza, quemar el coche de un vecino porque está hace mucho tiempo en un determinado lugar”,afirmó.

Fenómeno complejo

Es por eso que Pimpinella considera que el de la quema de coches es un fenómeno más complejo de lo que se piensa, que se debe estudiar como un conjunto y no desde la particularidad: “El asunto forma parte de una complejidad. Cuando es así, y es lo que sucedió con Colombia y Francia, hay que trabajar desde la inteligencia criminal y determinar si tenemos un problema o varios, si hay coches que fueron quemados por un piromaniaco, por una tribu no identificada o por interesados. En esos países resolvieron el problema con especialistas en informática, haciendo un seguimiento de las redes sociales, porque en todo ese pool siempre alguien que quema los coches con un fin y lo comunica por medio de ellas”, manifestó.

Al mismo tiempo, señaló que el contagio social juega un papel muy importante en el caso de quienes ven la quema como una solución particular, porque se transforma en una herramienta: “Puede ser la idea que les falta para cerrar la acción. Esto se ve muy bien en los suicidios, cuando la forma de autoeliminación se repite”, mencionó.

Por otro lado, Pimpinella destacó que la forma en que se realizan las quemas también es importante, ya que el modo de operar no se contagia y puede dar pistas para solucionar el problema.

El fuego

Para el forense, el hecho de que se use fuego también es muy significativo. En el caso del piromaniaco, es una fuente de placer; para las tribus, es una herramienta que sirve para convocar público; en el caso de los particulares, el fuego es una forma que se contagia. “Si hacemos una revisión del punto de vista antropológico y epistemológico, el fuego es uno de los primeros elementos de la naturaleza que el hombre quiso dominar. Hay cuestiones ancestrales que se reflejan en los hechos actuales, hay una matriz desde esa perspectiva”, finalizó.

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