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Esta mañana se entregaron 40 bicicletas con sus respectivos cascos y lingas reglamentarias a los estudiantes beneficiarios de la convocatoria 2016 de las becas de estudio. El acto contó con la presencia del rector de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), Miguel Irigoyen; la secretaria de Bienestar Universitario, Katya Zuska Zurbriggen; la directora de Bienestar Estudiantil, María Lucila Fierro; la presidente de la Federación Universitaria del Litoral (FUL), Alicia Barletta; y autoridades de la casa de estudios.

Esta propuesta no sólo brindará una herramienta más a aquellos estudiantes que se encuentran en contextos vulnerables y deseen ingresar, continuar y graduarse de sus estudios en el sistema de educación superior, sino que a su vez la bicicleta, promueve una manera más eficiente, sustentable y saludable para movilizarse por la ciudad.

“Sabemos que para muchos es muy difícil seguir con sus estudios, con las dificultades actuales. Esperamos realmente contribuir para que ustedes tengan menor cantidad de problemas y que puedan concentrarse en su mayor objetivo, terminar con sus estudios, y  además hacer un aporte ante los problemas de tráfico y medio ambiente”, resaltó Irigoyen.

“Desde la Federación Universitaria del Litoral (FUL) celebramos que esta iniciativa estudiantil con el paso de los años se convierta en una política de bienestar universitario de nuestra Universidad. Este acto es muestra que los estudiantes estamos comprometidos en proponer nuevas ideas y proyectos para construir entre todos una universidad más inclusiva”, destacó Alicia Barletta.

En bici a la facu

Como alternativa al uso del auto o del transporte público, la bicicleta es un medio de traslado que está sumando cada vez más seguidores. En general su uso concentra beneficios que se relacionan con la salud y la calidad de vida de los usuarios ya que promueve la actividad física y un estilo de vida saludable; por otra parte, es un medio de traslado que permite subsanar los gastos de transporte; beneficia al medio ambiente; y es una alternativa ante la crisis energética.

En este sentido la UNL fomenta el uso de la bici como medio de transporte y lo hace desde dos propuestas: las becas de bicicletas, destinadas a estudiantes universitarios; y la campaña de #HábitosSaludables que, bajo el mensaje “Comunidad UNL en movimiento”, promueve estilos de vida saludables y activos para mejorar el bienestar físico, mental y social de toda la comunidad universitaria, abordando los ejes: actividad física; alimentación, y salud.

Gabriel Pinto, profesor de educación física de la Dirección de Deportes UNL, explica que el uso regular de la bicicleta es saludable “desde todo punto de vista”, ya que los beneficios son múltiples: cardiovasculares, para consumir energía, económicos, tiempo, etc.

Pinto se traslada en bicicleta a sus lugares de trabajo desde hace 8 años y cuenta que “el primer beneficio es en el bolsillo, se nota muchísimo el ahorro, además del tiempo”.  Y aclara que “si bien cuesta el primer mes -hay que acostumbrarse-, después cada persona encuentra su ritmo”.

El profe además resalta algunas pautas de seguridad para andar en bicicleta cualquiera sea momento del día. “Hay que tener en cuenta el uso del casco. Yo lo viví en primera persona, volviendo un día del trabajo me tocó un auto y aterricé de cara al asfalto, y eso que venía a baja velocidad. El casco es un elemento imprescindible tanto como las luces delante y detrás de la bici”.

Punteando

Entre los principales beneficios para la salud, se recomienda el uso regular de la bicicleta porque:

-Es una actividad completa, protege articulaciones y mejora el sistema circulatorio e inmunológico.
-Según estudios, andar en bicicleta reduce el riesgo de infarto en más de un 50%.
-Es una actividad cíclica, no genera impacto por eso es recomendable para las articulaciones de las rodillas
-Es anti estrés y mejora el ánimo.
-Disminuye el peso corporal.