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Los lunes del Paraninfo ya son un clásico de la agenda cultural de la ciudad y la región. Cada año una programación variada se propone para los días lunes en el mítico espacio de la UNL, Bv. Pellegrini 2750. Este año los lunes de mayo a las 21, los amantes de la buena música podrán disfrutar de cuatro recitales incomparables.
El lunes 7 será la primera fecha con el Dino Saluzzi Quinteto que se completa, además del bandoneón, con Félix Saluzzi, en saxo y clarinete, José Saluzzi, en guitarra, Matías Saluzzi, en bajo y Quintino Cinalli, en batería. En este concierto, se presentará material de la vasta obra de Saluzzi, desarrollado de acuerdo a un recorrido cronológico de la misma, con especial acento en aquellas composiciones ligadas a los ritmos y formas pertenecientes a la cultura y la música popular.
Además, esa tarde a las 14, Saluzzi brindará una charla abierta a todo público en el Foro Cultural de la UNL, 9 de julio 2150. Este encuentro entre el músico y el público que se acerque pretende “favorecer el intercambio de experiencias, visiones y conocimientos sobre la actualidad y proyección de la música de raíz popular argentina”, destacaron los organizadores.
El costo de las entradas para el concierto será de $40 generales y $30 con descuento. Se venden ese día a la mañana en el Foro Cultural, y dos horas antes del concierto, en la boletería de la sala.

Músico inclasificable
Nacido en Ingenio San Isidro, en Campo Santo, Salta, hace 77 años, hijo de un músico, Cayetano Saluzzi, el bandoneonista es uno de los músicos más inclasificables de la escena actual.  Además de su padre, recibió influencias de músicos salteños como Cuchi Leguizamón, y por la música de tango de Francisco de Caro y de Agustín Bardi.
Es compositor e intérprete. Su música cobija al jazz, al tango, los ritmos populares argentinos y también a la llamada música culta. Todo convive en perfecta armonía y es esa música la que lo ha llevado a recorrer Europa y a grabar en el prestigioso sello alemán ECM.
“La música no existe sin la interpretación. Lo que está escrito en el papel es nada más que una guía, interpretar la cultura sobre todo, sacar todo eso que el compositor quiso narrar. La música es bella cuando está presente todo el dolor, la alegría, todo lo que produce un estado anímico que viene de un ser humano que sufre, vive, canta, y pasa por la vida igual que cualquier otro. Si esa música es solamente un instrumento para recoger aplausos, para asombrar a los otros y no contar nada de lo que uno ha vivido, el intento no está logrado”, dice Saluzzi.
Son los sonidos de ese bandoneón que elige como instrumento y que ha pasado por el sonido único e irrepetible de Alfredo Gobbi, por el tango nuevo de Astor Piazzolla en los años ’60, por los duendes de Bach y Mozart y los giros más contemporáneos hasta formar una personalidad artística que posee estilo propio.
Prueba de ello es su último disco “Navidad de los andes” (2011), que presenta un puente estético entre los paisajes andinos de su infancia y la ciudad, con sonidos latinoamericanos y con una formación de trío que incluye a su bandoneón, a su hermano Félix en saxo tenor y clarinete, y la alemana Anja Lechner en violoncello. El resultado es una sonoridad única, con cálidos giros rítmicos reconocibles y el color del ensamble de estos instrumentos que lo coloca en una pieza destacable dentro de la world music.
“Siempre propongo narrar y contar algo y lo que pasa en nuestras vidas antes de mostrar el virtuosismo”, cuenta y agrega “esto de interpretar la cultura, de saber cómo es la frase de una zamba, quién fue su autor, cómo se toca, cómo se expresa, cómo ha nacido, en qué momento y en qué lugar, es lo que ayuda a que uno con toda esa carga emotiva, sienta una conexión bellísima”.

Otras fechas
El lunes 14, se presentará Juana Molina, en tanto el 21 subirá al escenario Pachuco Cadáver, el dúo integrado por Guillermo Piccolini y Roberto Pettinato. Para el cierre, Adrián Iaies presentará su último disco melancolía, el lunes 28.