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Silvia Micucci (53), ingresó en la obra social de la Universidad Nacional del Litoral en el año 1983, actualmente se desempeña como secretaria privada en la Secretaría de Ciencia y Técnica de Rectorado de la UNL. En el 2011 le diagnosticaron cáncer de mama y vivió un momento muy difícil en su vida, pero a fuerza de voluntad, cuidados y tratamientos médicos se repuso y este año pudo realizar, junto a Indiana Diez Rodríguez, no-docente de Esperanza, una estancia en México, en el marco del Programa MAGMA.

“Tuve una experiencia de vida bastante dura, he pasado momentos muy difíciles y gracias a Dios los pude vencer, me aferré mucho a la fe y salí airosa de una dura enfermedad”, dijo Silvia, que lleva más de 30 años de servicio en la UNL. “Lo que viví en México lo tomé como una bendición, como un regalo inesperado por parte de Dios. Hoy puedo decir con todas las letras ‘la pucha que vale la pena estar vivo’”, dijo usando la  famosa frase que inmortalizó Héctor Alterio en la película argentina “Caballos Salvajes”.

Estancia en México

La Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) se encuentra localizada en Colina Chamilpa, ciudad de Cuernavaca, en el estado de Morelos, a 80 km de distancia de la Ciudad de México (D.F). La cantidad de estudiantes que asisten a esa casa de estudios es de 30.000 aproximadamente.

“Durante la estancia tuvimos oportunidad de trabajar con diferentes áreas de la administración central de la UAEM. Inicialmente nos reunimos con la jefa del Departamento de Movilidad Académica, quien nos explicó el proceso que se lleva a cabo para el desarrollo del Programa de Movilidad Estudiantil, ya que tienen programas de movilidad nacionales e internacionales”, afirma Micucci.

“Por invitación del Director general de Servicios Académicos y la autorización de las Comisiones Dictaminadoras, tuve la oportunidad de integrarme como observadora a algunas de las reuniones de las Comisiones Académicas y Revisoras, donde pude escuchar sobre la organización y desarrollo para la evaluación de profesores. En este sentido, sostengo que la estancia en México constituyó una experiencia de aprendizaje”, prosigue Micucci.

Sacarse los miedos

La canción de Diego Torres, “Color Esperanza”, resuena como una sinfonía de fondo en la voz de Silvia Micucci, ya que ella tenía temores, miedos de viajar debido a que al estar en un país extranjero y con los antecedentes de una enfermedad difícil, pensaba que podía tener inconvenientes. Pero la estancia fue enriquecedora.

“En la UAEM nos recibieron muy bien, y me hicieron sentir muy cómoda, no como un paquete que tenían que “soportar” y “atender” sino como una integrante más del staff de esa Universidad”, sostuvo.

Micucci contó que tanto a ella como a su acompañante las integraron al trabajo cotidiano, lo que implicó que pudo comprender cómo realizan diferentes programas, y apreciar semejanzas y diferencias entre las actividades y los programas que realizan la UAEM y la UNL.

Sentir Orgullo

“Me agranda decir que soy empleada de la UNL, me siento orgullosa de pertenecer a esta institución; tengo una pertinencia institucional fuerte porque conocí muy buenas personas en lo humano en esta Casa de Estudios”, expresa Micucci.

“Estaba indecisa de aplicar al Programa MAGMA, pero le recomendaría a quien quiera presentarse que lo haga, que no pierdan la posibilidad de realizar esa experiencia de vida que implica conocer otras universidades, otros lugares porque uno crece espiritualmente: conocer otras latitudes representa una experiencia enriquecedora y significativa”, concluye Micucci.

El Secretario de Relaciones Internacionales de la UNL, Ing. Julio Theiler, expresó su beneplácito con el éxito de las experiencias de estas características. El mandatario aseguró que la universidad  debe incorporar a las personas que trabajan en gestión y administración, ya que el objetivo de lograr una internacionalización plena de la universidad, requiere que sus procesos administrativos se integren y adecuen a este modo de relacionamiento. “En este sentido, toma mucho valor la iniciativa de movilizar a los cuadros administrativos de las facultades y secretarías”, expresó, y agregó que “el Programa MAGMA es nuestra primera accion ene este sentido, pero en 2015 se agregará a estas propuestas la movilidad de personal academico y de gestión a través de AUGM”, institución de la que la UNL forma parte y que reciéntemente ha también desarrollado esta iniciativa.

Sobre el Programa MAGMA

Este Programa  es fruto de un Convenio Específico de Colaboración para la Movilidad de Académicos y Gestores entre universidades argentinas y mexicanas (Programa MAGMA) suscripto en 2009 entre el Consejo Interuniversitario Nacional  (CIN) y la ANUIES (Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior).
Los destinatarios son los docentes (tanto profesores como auxiliares) y el personal de gestión y no docente de la UNL. Los seleccionados realizan una movilidad con financiamiento.

Los objetivos del Programa son: promover acciones de cooperación interinstitucional;  fortalecer la integración entre las instituciones; fomentar y propiciar el intercambio de docentes, experiencias en metodologías de enseñanza, investigación académica y acciones interdisciplinarias; e incentivar la capacitación de gestores de actividades de internacionalización de las instituciones, compartiendo las experiencias entre las instituciones y creando redes de investigación.