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Si bien la mañana estaba fría, eso no impidió que unos cincuenta alumnos de un jardín de infantes de la ciudad se acercaran a las instalaciones de la Reserva Ecológica de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y la Fundación Hábitat para ser los primeros en usar el nuevo mirador de aves.
El mirador fue reinaugurado el pasado lunes luego de dos años de haber estado inhabilitado porque había sido quemado intencionalmente. Ahora, con un nuevo diseño y construido con barro y madera, los visitantes tendrán una vista privilegiada a la laguna de la reserva donde más de 150 especies de aves pueden ser avistadas.
La reinauguración fue realizada por el rector de la casa de estudios, Albor Cantard y por el vicepresidente de la Fundación Hábitat & Desarrollo, Pablo Tabares. Además estuvieron presentes Gustavo Menéndez, secretario de Extensión de la UNL; Claudia Neil, subsecretaria de Turismo de la ciudad, y Alba Imhof, coordinadora de las actividades de la Reserva. Además, participaron chicos y docentes del jardín de infantes incorporado Don Bosco.

Un hábitat natural en lo urbano
La Reserva nació hace 13 años y en ese momento esta zona de Santa Fe era muy distinta. En estos pocos años todo cambió, a su lado se construyó un predio universitario, la ciudad universitaria fue avanzando cada vez más en la construcción de sus edificios y la costanera este se vio con más infraestructura. Esto hizo que el hábitat natural de la Reserva quede inserto en el medio de la urbanización. “Y es esta es la particularidad más destacada que tiene”, fue lo primero que explicó Cantard. “Porque además de ser una actividad recreativa, de diversión y paseo para la comunidad universitaria y santafesina, les sirve a estudiantes e investigadores de la universidad para trabajos académicos y de investigación”, explicó el rector.
“Tratamos de que esta sea una reserva modelo de toda la provincia porque estamos hablando de un área natural protegida que tiene características únicas. Es la única de la provincia que tiene infraestructura de uso público, caminos, senderos y accesos”, completó Tabares.

Mirador integrado
La reserva cuenta con, aproximadamente, 150 especies de aves que la visitan de manera regular o temporalmente a través de las migraciones. El diseño del nuevo mirador es integrado con el hábitat de la laguna de la Reserva, y está construido con barro y madera con la idea de poner en relieve las políticas medioambientales que se están llevando adelante desde la Universidad.
“Lo que se pensó al elegir este proyecto de mirador fue que, al tener un techo inclinado hacia abajo, si se ve desde arriba parece lo que se denomina un techo vivo, es decir que las aves cuando se acercan al mirador piensan que es parte del ambiente”, explicó Alba Imhof.
La reserva está abierta de miércoles a domingo para poder visitarla y hacer avistamiento de aves. La entrada es gratuita y al ingresar uno puede acceder a una visita guiada particular o sino puede pedir turno a través de la Fundación Hábitat para ir con contingentes de alumnos, docentes, y demás.

Plan de manejo
En la inauguración, Tabares también anunció la creación de un Plan de Manejo de la Reserva en el que desde el año pasado se está trabajando. “Contamos con un documento base para administrar una reserva natural, donde están los programas y objetivos del manejo de conservación y de investigación”, explicó.
Este Plan será puesto a consideración de la comunidad universitaria y de la sociedad santafesina para que puedan opinar y realizar aportes. “Va a estar desde esta semana en la intranet de la UNL y en la web de la fundación para que lo puedan leer y dejar los comentarios que quieran aportar”.

Para más información reservaecologica@unl.edu.ar o www.habitatydesarrollo.org.ar.