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Con el objetivo de “consolidar competencias y buenas prácticas en planeamiento y gestión de bienes naturales vivos y en la generación de políticas, estrategias de conservación y uso sostenible; promoviendo una formación transdisciplinaria acorde con las actuales demandas y requerimientos nacionales e internacionales”, se realiza el curso de posgrado “Manejo de Bienes Naturales vivos y sus espacios de gestión”.

La capacitación es organizada desde la Facultad de Humanidades y Ciencias (FHUC-UNL), y cuenta con la participación de distintos especialistas de diferentes unidades académicas de la UNL; entre ellos, Med. Vet. Alejandro Larriera (FHUC-UNL); Dr. Alejandro Giraudo (FHUC-UNL; INALI, CONICET-UNL); Dr. José Francisco Pensiero (FCA-UNL, ICiAgro Litoral CONICET-UNL); Dr. Gonzalo Sozzo (FCJS-UNL); Dr. Pablo Siroski (ICiVet FCV-CONICET, Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, Santa Fe) y CPN. Pablo Tabares (Vicepresidente de la Fundación Hábitat y Desarrollo) La actividad es coordinada por la Dra. Luciana Montalto (FHUC-UNL; INALI, CONICET-UNL); la Lic. Alba Imhof (FHUC-UNL) y la Dra. Bárbara Tolozano (Secretaría a Ciencia, Arte y Tecnología-UNL)

Bienes Naturales

Uno de los objetivos específicos del curso refiere a “conocer, analizar y evaluar críticamente conceptos relacionados con la conservación, el manejo y la puesta en valor de los bienes naturales vivos”. Es en este sentido, que “preferimos hablar de bienes naturales, antes que de recursos naturales; dado que cuando usamos el término recursos naturales le estamos poniendo un valor, y por lo general consiste en un valor económico”, sostiene José Pensiero, docente-investigador de la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA-UNL) y añade “nosotros nos enfocamos en el valor que pueden tener las especies no desde lo económico sino por los servicios ambientales que prestan, como por ejemplo, las plantas al dar sombra, regular los ciclos del agua, absorber dióxido de carbono y liberar oxigeno, entre otras”.

“Por eso en el curso preferimos usar el vocablo de bienes naturales y no de recursos naturales”, prosigue Pensiero.

Mirada Transdisciplinaria

Se entiende por transdisciplinariedad a un “proceso según el cual los límites de las disciplinas individuales se trascienden para tratar problemas desde perspectivas múltiples con vista a generar conocimiento emergente”. En este sentido, los problemas ambientales por su complejidad; como así también, las estrategias de abordaje “no pueden ser analizados desde una sola disciplina, con una sola caja de herramientas o conceptos, sino que deben ser abordados transdisciplinariamente; hay una necesidad de interconectarse y trabajar de forma colaborativa con profesionales y enfoques desde distintas disciplinas”, afirma Larriera.

Tips para conservar el medio ambiente

“A la hora de conservar los bienes naturales considero que hay que tener en cuenta dos cuestiones fundamentales y, al mismo tiempo, antagónicas: por un lado, elaborar estrategias para conservar el patrimonio que sean aprobadas por la sociedad, es decir, quien les da legitimidad para que tengan éxito es la comunidad; y por el otro lado, toda iniciativa en procura de conservar el medio ambiente tiene que tener una base científica, es decir, las líneas de manejo tienen que tener rigor científico”, indica Alejandro Larriera, docente-investigador de la Facultad de Humanidades y Ciencias (FHUC-UNL)

“Es en este sentido, que es sumamente importante que los asistentes al curso comprendan que conservar no es sinónimo de “no tocar”, sino que se puede explotar de forma racional los bienes naturales”, continúa Pensiero.

El dato: Viaje a Temaiken

La propuesta está destinada a profesionales o estudiantes avanzados de carreras universitarias con interés de formarse en el planeamiento y gestión de bienes naturales y en la generación de políticas, estrategias de conservación y uso sostenible. Las clases son virtuales y desde la coordinación tienen previsto un viaje de una jornada al Parque Temaikén (Escobar, provincia de Buenos Aires) dado que el mencionado parque temático es una “excelente oportunidad para compartir, de forma presencial, una experiencia enriquecedora con los alumnos y alumnas y vivenciar un espacio que es un ejemplo, es decir, la mejor opción en cuanto a conservación del patrimonio natural ex situ refiere”, concluye Larriera.