Aguas residuales
Se inauguró la séptima muestra de «El agua en imágenes»
Jueves 27 de julio de 2017 / Actualizado el jueves 27 de julio de 2017
Fue a través de un acto en el Foro Cultural de la UNL. También se distinguieron a los autores de las 11 fotografías seleccionadas. El primer premio fue para «Voluntad y esperanza», de José Luis Glavic, de Caseros, provincia a Buenos Aires.
Para celebrar los días mundial y nacional del agua, establecidos el 22 y el 31 de marzo respectivamente, la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH) y el diario El Litoral, con el auspicio de Aguas Santafesinas SA, organizaron el VII Concurso de fotografía «El agua en imágenes», como parte de las actividades que promueve la Cátedra UNESCO «Agua y Educación para el Desarrollo Sostenible», con sede en la FICH. El tema propuesto para esta edición fue «aguas residuales».
El certamen congregó a participantes de entre 9 y 67 años de edad, de diversos oficios y profesiones, provenientes de distintos lugares del país y del extranjero, tales como Santa Fe, Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos y México. Se recibieron 93 fotografías, de las cuales 11 resultaron seleccionadas: un primer premio, dos menciones y ocho destacadas para la muestra.
El martes 25 de julio, en la sala Federico Aymá del Foro Cultural de la UNL, quedó inaugurada la muestra –que podrá visitarse durante julio y agosto– y se distinguieron a los autores de las fotografías ganadoras. “Estamos muy satisfechos de que año a año este concurso se vaya consolidando, tanto por la cantidad como por la calidad de los trabajos presentados. Esto nos compromete a seguir trabajando en esta actividad, para lo cual quiero agradecer a El Litoral, ASSA y Cátedra UNESCO ‘Agua y educación para el Desarrollo Sostenible’ por el permanente apoyo que brindan al concurso”, expresó Raúl Pedraza, decano de la FICH, quien presidió el acto acompañado por el secretario de Cultura de la UNL, Luis Novara; la directora del Diario El Litoral, María José Lina Pilatti; la directora del Museo y Archivo Histórico de la UNL, Stella Maris Scarciófolo; el director de la Cátedra UNESCO «Agua y Educación para el Desarrollo Sostenible», Mario Schreider, y el señor responsable de Relaciones Institucionales de ASSA, Germán Nessier.
Voluntad y esperanza
«La fotografía fue tomada en mayo de 2014, en un campo de las afueras de Tigre, provincia de Buenos Aires. Me llamó la atención la presencia de las dos monjas en ese lugar, atravesando un sector de aguas residuales estancadas. Mi idea fue mostrar el contraste entre lo nauseabundo del lugar y la actitud de las dos monjas, quienes sin perder la fe ni el humor, intentaron sortear el problema con ‘voluntad y esperanza’», contó José Luis Glavic, ganador del primer premio, oriundo de Caseros, Buenos Aires.
Las dos fotografías que obtuvieron mención fueron Aguas residuales», de Guido Bertola (Santa Fe) y «Aguas vivas», de Diego Gentinetta (Santa Fe). También integran la muestra «Sin retorno», de Delfina Acosta (Santa Fe); «Estanque» y «Salida a la laguna», de Jorge Anichini (Santa Fe); «Agua que no es agua», de Daniel López (CABA); «Corrosión», de Aldo Luján Zanetti (Córdoba); «Medio mundo», de Marcela Reynares (Santa Fe); «Juego peligroso» y «Tratamiento», de Marcela Serra (Rafaela).
Cabe destacar que el jurado estuvo integrado por Stella Maris Scarciófolo, Directora del Museo y Archivo Histórico de la UNL, Secretaría de Cultura de la UNL; Cristóbal Lozeco, Secretario de Extensión y Vinculación Tecnológica de la FICH; Marcela Pérez, Directora del Departamento de Hidrología de la FICH, y Mauricio Garin, fotógrafo del diario El Litoral.
Aguas residuales
Para el año 2050 se espera que cerca del 70% de la población mundial viva en ciudades, duplicando la cantidad de habitantes que actualmente reside en ellas. Paralelamente, también aumenta el desarrollo industrial y la producción de alimentos. Como producto de este crecimiento, no sólo se incrementa la demanda de agua potable –que para el año 2030 se prevé que se duplique–, sino también la generación de aguas residuales provenientes de hogares, industrias y actividades agropecuarias.
Este problema se agrava debido a que alrededor del 80% de esas aguas residuales a nivel mundial se vuelcan al ambiente sin ser tratadas ni reutilizadas. En este contexto, Naciones Unidas considera que la gestión de aguas residuales está descuidada y que las mismas no deben ser consideradas como desechos que deben eliminarse, sino como recursos aprovechables.
“Al respecto, Naciones Unidas estableció como meta para el año 2030 llegar a tratar el 50% de las aguas residuales, con lo cual se lograrían beneficios significativos, fundamentalmente en el medio ambiente. Las cuatro acciones a las que se orienta una mejor gestión de las aguas residuales apuntan a reducir la contaminación de los cuerpos receptores, eliminar la contaminación de las aguas tratadas, reutilizar esa agua y aprovecharla para la producción. En este sentido, la adecuada gestión de las aguas residuales se ha vuelto uno de los principales desafíos científico-tecnológicos de la humanidad”, añadió Pedraza.