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El emprendedor tecnológico Mateo Salvatto brindó una charla sobre emprendedorismo, innovación, tecnología e inclusión en el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral. Con el emblemático recinto colmado, la actividad se llevó a cabo el lunes 11 de diciembre y fue organizada por Dubner construcciones y Sauce Inmobiliaria y sumaron a la UNL en esta iniciativa.
Previamente, Mateo se reunió con el rector Enrique Mammarella; el secretario de Vinculación Tecnológica de la UNL, Javier Lottersberger; y titulares de las empresas organizadoras. En dicha instancia los gestores universitarios comentaron sobre los instrumentos que tiene la Universidad para apoyar el desarrollo emprendedor, entre las que se mencionaron asesoramiento técnico, incubación de empresas, formación, acceso a la red de contactos y acompañamiento en la búsqueda de financiamiento e inversiones: "Contamos con diversas herramientas que en su mayoría son gratuitas y de gran alcance porque como universidad pública trabajamos para fomentar la creación de empresas para que haya más trabajo, más crecimiento, más desarrollo", explicó Mammarella.



Emprendedurismo e innovación
Salvatto es un emprendedor tecnológico de 24 años de Buenos Aires. A sus 17 fue Campeón Internacional de Robótica y un año después creó su primera empresa: Asteroid, cuyo primer producto, Háblalo, ya asiste a más de 350.000 personas con discapacidad en todo el mundo de forma gratuita.
Inició la charla hablando sobre la narrativa que tenemos en Argentina, esa idea negativa sobre el país y nuestras posibilidades; para luego comentar diversos ejemplos y datos que a su parecer demuestran lo contrario, que se pueden hacer cosas buenas y realizar aportes para cambiar el mundo. “La historia que queremos contar o compartir en esta charla es una historia de emprendedorismo, de accesibilidad, de inclusión, de cómo la tecnología puede ayudar a las personas con discapacidad. Pero más importante aún, es una historia o una conversación sobre nosotros los argentinos, la innovación argentina, cómo proyectamos en nuestro país, y cómo nos vemos a nosotros mismos; sobre cómo nos narramos a nosotros mismos y cómo todo eso afecta a nuestros resultados. Pero, increíblemente, a pesar de todo lo que nosotros creemos que tenemos de negativo, tenemos mucho más de positivo que no solemos resaltar” comentó minutos antes de iniciar su presentación.
Contraponiendo esa idea con datos y ejemplos concretos, habló sobre las aptitudes emprendedoras de los argentinos, sobre su capacidad creativa y la calidad de la ciencia. “Todo eso viene de algo previo, que en la Argentina es la creatividad y la resiliencia, ese levantarse todos los días y surfear tsunamis, ese pasar por cualquier tipo de obstáculo y poder resolver una problemática. Ese `lo atamos con alambre`, que nosotros connotamos negativamente, que es súper positivo; de hecho, con lo poco que hay resolvemos siempre”, agregó. “Cuando vos lo miras, en los reglamentos, en el ranking de los mejores programadores están los argentinos, si miras la cantidad de empresas unicórnios, que son las que tienen más de mil millones de dólares de capitalización bursátil, Argentina es el que más tiene per cápita de toda Latinoamérica, más que Brasil, más que México. Si crees en la ciencia, somos el país con más premios Nobel de la región, en total; ni hablar del ecosistema científico de la Argentina, la cantidad de inventos. Si podemos lograr todo eso con la cantidad de problemáticas o contextos macroeconómicos que tenemos y tuvimos durante buena parte de nuestra historia moderna, imagínate lo que podríamos lograr si no tuviéramos eso”, concluyó.

Tecnologías para la inclusión y emprendimientos
Durante la conferencia también se refirió al modo en que logró concretar su empresa Asteroid, desarrollar tecnologías que buscan la inclusión de personas con discapacidad y el impacto que esto trajo en su vida y en la de otras personas. La idea para generar la aplicación Háblalo, que asiste a sujetos en todo el mundo, partió de buscar una solución a las dificultades de comunicación que tenían los alumnos hipoacúsicos de su madre - docente en lenguaje de señas-, muchos amigos suyos y conocidos. Hoy es utilizada por 350.000 personas con diversas discapacidades comunicacionales en 65 países de los 5 continentes, de forma 100% gratuita, sin conexión a internet y en 40 idiomas. En este punto, comentó que su modelo de negocios está orientado a monetizar con la venta de la aplicación a empresas y organizaciones que buscan ser más inclusivos de las personas con discapacidad, brindando servicios adaptados. “Creo que no todo lo que es tecnología con impacto social o accesibilidad tiene que ser gratis, o no generar nada de dinero. Yo soy partidario de todo lo contrario, un mundo ideal donde las cosas que generan accesibilidad facturen muchísima plata, porque es la única manera de que las personas con discapacidad no tengan que pagar”.
Para finalizar comentó algunos ejemplos de hombres y mujeres quiénes a partir de usar la app Háblalo han mejorado considerablemente su calidad de vida. Esas historias le permitieron reflexionar sobre “¡cuánto mundo nos queda por cambiar! En el mundo hay 1.100 millones de personas con discapacidad, de las cuales 700 millones, mínimo, son discapacidades comunicacionales. Entonces si cambiar el mundo es tratar de encontrar estas soluciones, la conclusión es que cualquiera puede cambiar el mundo. Todo lo que hicimos con nuestra empresa fue con la única fórmula con la que los argentinos hacemos las cosas suceder: con garra y corazón”.