Extensión
Por una producción sustentable
Lunes 20 de octubre de 2014 / Actualizado el miércoles 22 de octubre de 2014
A través del proyecto “Promoción de buenas prácticas agrícolas”, se trabaja desde hace un año en localidades de Santa Fe en busca de lograr el desarrollo de una producción sustentable y lo más saludable posible.
Según está definido en el libro “Agroecología. Teoría y práctica para una agricultura sustentable” del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la producción sustentable se define como: “(…) un modo de agricultura que intenta proporcionar rendimientos sostenidos a largo plazo, mediante tecnologías y prácticas de manejo que mejoren la eficiencia biológica del sistema” (Altieri y Nichols, 2000).
Desde este enfoque, la Universidad Nacional del Litoral a través del proyecto de extensión titulado “Promoción de buenas prácticas agrícolas”, dirigido por el Ing. Agrónomo Eleodoro del Valle, apunta a desarrollar sus acciones en tres localidades de la zona centro de Santa Fe: Santa Rosa de Calchines, Llambi Campbell y Humboldt, con el fin de informar y promover sobre el sistema de producción sustentable.
Estos territorios fueron seleccionados debido a que algunos de los integrantes del proyecto y de la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA) tenían vínculo previo con productores de dichas zonas. En este primer período del proyecto, se ha trabajado en la región costera. Se llevaron a cabo dos charlas y se hizo, además, un seguimiento de los campos atendiendo a problemas puntuales. Asimismo se brindaron charlas para técnicos y productores.
Según el Ing. del Valle, lo que impulsó la realización de este proyecto fue la demanda de atención técnica que tienen esas localidades, y el hecho de que la Facultad no estaba teniendo llegada a esas regiones, es así que con los proyectos de extensión, los profesores de Agrarias comenzaron a relacionarse más intensamente con estos sectores y sus productores.
Una cuestión que llamó la atención del grupo de extensión fue la presencia de productores jóvenes, muchos, hijos también de productores, que en otras ocasiones no se hacían presentes. Según Del Valle la presencia de estos nuevos participantes permite incorporar conocimientos que los profesores están interesados en transmitir, y que al hacerlo a las nuevas generaciones sostienen las prácticas sustentables y saludables serán incorporadas.
Cambio de paradigma
Si bien el reemplazo de unas acciones por otras es progresivo y lento, ya que hay que romper con costumbres y acciones que son llevadas a cabo por generaciones, la recepción de las actividades del proyecto ha sido más que satisfactoria, incluso algunos cambios ya pueden observarse.
Del Valle sostiene que “muchas veces, pequeños cambios son muy importantes, y ya los podemos observar porque, por ejemplo, un simple hecho como el que los productores empezaron a usar protección al aplicar los productos químicos de alta toxicidad”. Asimismo expresa que “a través del proyecto esperamos mostrar los daños de la aplicación “en cuero” y ver los cambios, la toma de conciencia, el cambio de actitud, eso es importante.”
El objetivo general que se plantea el equipo de extensión es seguir trabajando en esas zonas por más tiempo, ya que son áreas que todavía demandan no sólo lo que hace al manejo de productos agrotóxicos o de agroquímicos, sino también “a otras cuestiones que por la cantidad de información uno no la puede dar en ese tiempo”, explica el director y continúa: “Como por ejemplo el manejo del agua, del riego, que la zona de la costa específicamente, trabaja los sistemas productivos con riego. La contaminación de napas, todos esos son temas que todavía hay que estudiar. Lo mismo con la mecanización, hay mucho que hacer en lo que se refiere a la mecanización de los cultivos. Son otras áreas que de a poco se pueden ir abarcando”, plantea del Valle.