En las residencias
Los intercambistas de la UNL viven el Mundial en Santa Fe
Martes 24 de junio de 2014 / Actualizado el martes 24 de junio de 2014
Vivir la Copa del Mundo lejos de sus tierras, compartir y festejar con santafesinos y extranjeros, hinchar por más de un equipo. Un semestre de intercambio con un plus deportivo.
Más de 90 jóvenes provenientes de 15 países arribaron en marzo a la Universidad para continuar sus estudios. En las últimas semanas de su estadía en la ciudad, viven la Copa Mundial de Fútbol que tiene lugar en Brasil.
Los estudiantes son de Colombia, México, Perú, Chile, Brasil, Paraguay, Uruguay, Portugal, Cuba, España, Francia, Italia, Canadá, Alemania y Suiza; la mayoría con sus seleccionados nacionales participando de la copa del mundo más importante del planeta. Muchos de intercambistas se encuentran en las diversas Residencias para Alumnos Extranjeros de la UNL. Estos hogares multiculturales se colmarán de voces y festejos en cada partido y con cada gol. Serán los estudiantes brasileños los que más atentos estarán. El mundial se hace en su “casa” y ellos están fuera de su país.
Lo bueno y lo malo
Desde hace un tiempo se han visto a través de los diversos medios de comunicación las manifestaciones de un pueblo brasileño que protesta en las calles por mejoras de todo tipo en lo social, lo político y lo económico. La juventud ha sido protagonista en 2013 y este año el foco está en el país, reflejándose en diversos ámbitos un clima de descontento y de oposición a la inversión de innumerables dólares para la concreción de este evento.
Pese a todo llega la hora de ponerse a prueba y de analizar los resultados de las mejoras propuestas para la infraestructura y el sistema de transporte. Las visiones positivas se concentran en las posibilidades de recuperar lo invertido/gastado a través de la afluencia de turistas y del crecimiento comercial que, según afirman los estudiantes, contará con la ayuda de la hospitalidad de los habitantes.
“Para mí este Mundial tiene una connotación muy especial, ya que ahora no sólo hay una cuestión futbolística involucrada sino que se está dando un contexto ideológico y un marco histórico que está siendo importante para Brasil, que es una toma de conciencia de las implicancias que tiene este acontecimiento en nuestro país. Ambos se presentan al mismo tiempo, el Mundial y el movimiento social de protesta. Mucha gente no entiende las manifestaciones, pero creo que se basan en la idea de hacer una contestación crítica para repensar la conducta de todos para los próximos años”, explicó Anderson Trindade Chaves de la Universidad Federal de Santa María (UFSM), de Rio Grande do Sul, Brasil, que estudia Licenciatura en Letras de la FHUC.
Juliana Graffunder Barbosa, de la UFSM, quien realiza materias de la Licenciatura en Ciencia Política de la FHUC, argumentó: “Pienso que lo bueno es que el Mundial es en nuestro continente. Creo que la mayor parte de los ciudadanos de Brasil piensan que fue una mala idea, que fue una decisión de un gobierno y que es un dinero que podría haber sido usado en las universidades, para mejorar la calidad de la educación, o en la salud. Este es un año electoral y esta es una medida populista. De igual forma, en general, nosotros ayudaremos a los extranjeros, intentando hacer lo mejor”.
Mucho que ofrecer
En este marco, y en respuesta a la pregunta acerca de qué desearía que se mostrase de su país, Leonardo Gallo Macera de la Universidad Federal de San Carlos, en São Pablo, Brasil, quien estudia Ingeniería Ambiental en la FICH, dijo: “Me gustaría que se conozca la vida de la gente, que es muy afectuosa. Vamos a recibir a todos muy bien. Si llego a encontrar a algún viajero cuando regrese le mostraré los puntos destacados de mi ciudad y las comidas típicas”.
Por su parte, Camila Campos Marcet de la Universidad Federal de Río Grande del Sur (UFRGS), que cursa materias de la Licenciatura en Historia de la FHUC, acotó que “sería importante que la gente deje de tener esa visión de que Brasil es uniforme y que se conozcan todos los ‘Brasiles’ porque es gigantesco y somos todos diferentes entre nosotros. La cultura del nordeste y la indígena es muy linda; sería buenísimo que el Mundial ayude a ver esto y que también se potencie el turismo”.
No podrá negarse que en el vasto territorio tropical se exteriorizará el fervor: “En Brasil el fútbol es un deporte importante, desde niños nos regalan como primer juguete una pelota y en la escuela se practica bastante”, agregó Leonardo.
Brasileños en Argentina
En una de las residencias para intercambistas más grandes de la UNL viven más de 10 brasileños que comparten el día a día con estudiantes de Colombia, México, Perú, Cuba, Chile, Paraguay y España.
“Torcer” en portugués, “alentar” en español, no importa con qué palabra se exprese, las expectativas crecen en cuanto pasan las semanas. Sin dudas, los estudiantes de la tierra de la samba sienten más que nunca que están en Argentina.
“Es muy diferente. Ver a los argentinos preparándose, arreglando las calles, coloreando todo de azul y blanco, es muy extraño. Claro que quisiera estar en Brasil con la fiebre del Mundial, pero lo vamos a vivir del mismo modo porque creo que vamos a ser campeones”, concluyó Amanda Di Paula Rodrigues de la Universidad Estatal Paulista (UNESP), de São Pablo, Brasil, quien realiza la Licenciatura en Administración en la FCE.
Fábio Alencar Lima de la UNESP, compañero de carrera de Amanda, contó cómo fueron los meses anteriores a su llegada: “Estaba tan entusiasmado con el intercambio que al principio el Mundial quedó un poco de lado. Cuando comenzó la venta de entradas me entusiasmé. Luego, llegó la respuesta de que había sido seleccionado para la movilidad y ahí me di cuenta de que iba a verlo en Argentina. Antes de venir pensé que aquí existía una rivalidad fuerte pero me descubrí que no es así. Hacemos bromas y es muy normal. Cuando cuento que voy a ver los partidos acá todos me dicen ‘¿cómo?, ¿por qué?’”.
“Es una sensación medio rara, más que nada en los colores… veo sólo azul, blanco, azul y me pregunto: ‘¿dónde está el verde y el amarillo?’ Pero es interesante y creo que estoy más ansiosa ahora para el Mundial que si estuviese en Brasil”, confesó Camila de la UFRGS.
Reuniones, hinchadas, banderas
Compartir y disfrutar parecen ser las premisas de los alumnos que planean cómo y dónde verán los partidos de apertura. El plan principal: amucharse en las salas de las diversas residencias, hacer “pororó” o preparar alguna otra comida y decorar el espacio con sus banderas y camisetas. Una segunda opción son los bares en donde se transmitirán los juegos.
No faltarán algunos valientes tutores de la UNL que también experimentarán este evento de una forma diferente: “El Mundial es un tema de charla repetido en cada juntada. Si bien todavía no organizamos nada concreto, es cuestión de arreglar días y horarios”, indicó Guillermo Holmann, estudiante santafesino de Ingeniería en Informática de la FICH y tutor internacional que acompaña a una joven mexicana durante este semestre.
“Creo que más allá del fútbol es un pretexto para estar unidos. Ahorita que todos estamos fuera de nuestros países sentiremos más nuestra nacionalidad y el amor a las patrias. Los mexicanos somos futboleros; cuando gana la selección se va con banderas a lugares emblemáticos. No sé cómo será aquí”, expuso Andrés Sáenz de la Universidad Autónoma de Yucatán, México, que se encuentra cursando Arquitectura en la FADU.
“El intercambio es un proceso único que se vive de manera muy intensa y con personas que terminamos sintiendo que conocemos desde siempre. Por eso, quiero estar con ellos y creo que va a ser un momento para celebrar una unión más que simbólica”, expresó Anderson de la UFSM.
Volver a festejar
Antonio Lora, de la Universidad del Sinú, Colombia, es parte de la carrera de Contador Público en FCE. Describiéndose como “un colombiano argentinizado” comentó que: “Hacía 16 años que nuestro equipo no participaba. Ahora que hemos clasificado, tengo la duda de cómo se estará viviendo en mí país ya que veo como se está desarrollando aquí. Un día tomé una foto de la peatonal y mis amigos de Colombia estaban sorprendidos por la decoración celeste y blanca. Hay que celebrarlo, vamos a reunirnos toditos porque es una fiesta. Si tengo que apoyar a algún equipo sería a Argentina”.
“Algo que se vive mucho en Colombia es la cultura del fútbol. La clasificación fue un espectáculo, fue como si hubiésemos ganado y resultó una linda oportunidad para ver al país unido. Es enriquecedor sentir la alegría de la Copa. Hemos pensado reunirnos en las residencias y cuando jueguen nuestras selecciones va a ser una locura”, manifestó Samara Díaz Lopera, de la misma institución colombiana, quien cursa Medicina en la Facultad de Ciencias Médicas (FCM – UNL).
“Quisiera que a Brasil le saliera todo bien. Como me gusta tanto el fútbol esto también me preocupa, ya que de lo contrario pasarán muchos años para que la sede vuelva a ser en Sudamérica”, sostuvo Antonio.
Deseos y pronósticos
Los países candidatos a ganar el trofeo más nombrados por los intercambistas son Brasil, Argentina, Alemania y España. “Como mi equipo no estará en el Mundial estoy apoyando a Brasil. El fútbol es una pasión en Paraguay, es algo que nos da mucha felicidad pese a que tenemos varios problemas”, resumió Fredy Coronel, de la Universidad Nacional de Itapúa (UNI), Paraguay, que realiza materias de la Licenciaturas en Economía y Administración en la FCE.
Alejandro Castro Rodríguez de la Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas (UCLV), Cuba, que estudia Licenciatura en Letras en FHUC, afirmó: “Mi principal motivación es que sucede en Brasil y que vivo con muchos compañeros de allí. Se ha gestado la cuestión de qué vamos a hacer durante los partidos, si vamos a reunirnos a ver la televisión, a comer palomitas de maíz, a vibrar la emoción universal que tiene el fútbol. Creo que voy a alentar para Brasil”.