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La Universidad Nacional del Litoral (UNL), junto con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Asociación Civil Grupo REDES y la Fundación Banco Credicoop (FBC) conformaron un consorcio interinstitucional para llevar a cabo un proyecto sobre “Estudios del Sector Agroindustria”.
Los resultados finales de la investigación fueron publicados en el documento llamado “Trayectoria y prospectiva de la agroindustria alimentaria argentina: agenda estratégica de innovación”. El mismo sintetiza y da a conocer los principales hallazgos y resultados del proyecto llevado a cabo en el marco del “Programa para Promover la Innovación Productiva y Social” del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.

La agroindustria juega un rol fundamental en el desarrollo nacional y regional como productora de alimentos y energía, a partir de la transformación de la biomasa (plantas, animales y microorganismos) en bioproductos. Las temáticas abordadas en el proyecto incluyeron los procesos de transformación alimentaria, focalizando en el estudio de las tecnologías de procesamiento de alimentos y de los marcos regulatorios en los ámbitos nacional y mundial. Las tecnologías de procesamiento de alimentos fueron analizadas a nivel general y, en particular, vinculadas a tres temas transversales: calidad integral, producción limpia (prevención y mitigación) y tecnologías emergentes (biotecnología, nanotecnología y TICs). Asimismo, se consideraron las tendencias y el impacto de tecnologías específicas relacionadas con las cadenas seleccionadas. La revisión de los marcos regulatorios se centró en el análisis de los sistemas de calidad y de propiedad intelectual.

En ese sentido, se identificaron como ámbito de intervención las cadenas agroindustriales, analizando en profundidad las de maíz, carne porcina, lácteos bovinos, olivo y frutas finas, buscando identificar patrones de innovación tecnológica e institucional relevantes para orientar la estrategia futura de la agroindustria alimentaria. Estas cinco cadenas fueron seleccionadas, entre otros criterios estratégicos, por su potencial de crecimiento productivo e innovación, las posibilidades de agregado de valor y su capacidad de aporte al desarrollo regional.

Metodología y resultados alcanzados

El proyecto, que fue desarrollado entre agosto de 2011 y junio de 2013, tuvo como finalidad analizar el estado del arte, las tendencias y la prospectiva de la agroindustria alimentaria argentina en el contexto mundial. La propuesta de trabajo se dividió en tres actividades: una de prospectiva tecnológica, otra de diagnóstico de situación de la agroindustria argentina y otra sobre vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva. “De esta última específicamente, es la que, desde la UNL, nos hicimos cargo”, sostuvo el Ing. Marcelo Grabois, integrante del equipo técnico por la Casa de Altos Estudios y quien es coordinador del Área de Información Tecnológica de la Secretaría de Vinculación Tecnológica y Desarrollo Productivo de la UNL.

Para ello se formó un equipo de trabajo que entre otras tareas se ocupó de seleccionar las mejores herramientas para el trabajo de vigilancia e inteligencia tecnológica, bases de datos y data-mining que finalmente se adquirieron y usaron, encontrar las fuentes de información relevantes, validarlas, seleccionar y analizar la información útil para la toma de decisiones, integrar expertos en los equipos de trabajo y plantear un panorama y tendencias de las cadenas en general y de las tecnologías consideradas críticas para el logro de los escenarios deseados. “ Aunque ha quedado un material súmamente útil para definir agendas de desarrollo de la industria agroalimenticia nacional, quizás lo más importante de todo este trabajo fue la capacitación de recursos humanos que hoy pueden encarar estudios de inteligencia, vigilancia de visión de futuro en áreas de desarrollo. Capitalizando la experiencia se ha creado el Programa de Inteligencia Estratégica y Tecnológica en la Facultad de Ingeniería Química”, agregó Grabois.

Con respecto a las conclusiones sostuvo que son muchísimas y se obtuvieron muchos datos ya que dentro de cada cadena se eligieron entre 20 y 30 segmentos tecnológicos y se plantearon los escenarios futuros posibles seleccionando los más deseables. A modo de ejemplo, el especialista mencionó que las altas presiones hidrostáticas es una tecnología madura que se está empezando a aplicar en todo el mundo y que Argentina debería incorporar mediante la adquisición de equipos y capacitar sus técnicos para implementar la conocida pasteurización fría que permite el almacenamiento de comidas hechas sin refrigeración.

Uno de los aspectos que se destacan es la recomendación de implementar políticas activas para estimular el uso de la Propiedad Intelectual para generar valor agregado a partir de la diferenciación mediante marcas colectivas, denominaciones de origen, patentes, variedades vegetales, etc.
Además se analizó cómo las empresas del rubro están utilizando herramientas de manejo de información, de manera creciente, en especial respecto a la administración de la organización, inidentificando una gran brecha respecto a la gestión de la información de contexto, que debe ser cubierta por nuevas disciplinas como la prospectiva, la vigilancia y la inteligencia tecnológica para la planificación estratégica.

Sobre la prospectiva y vigilancia tecnológica

Sobre la importancia de la temática, Grabois manifestó que este tipo de estudios a nivel internacional no hace mucho tiempo que se realizan de esta manera porque requieren generación de conocimiento a partir de la información para la toma de decisiones estratégicas en políticas institucionales.
Hoy existe una disciplina que está madurando, que no tiene más de 10 años y que está nutrida por diferentes vertientes. Entre ellas se pueden mencionar lo que se conoce como vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva. Estas corrientes empezaron a confluir para que hoy haya un grupo de profesionales que están trabajando multidisciplinariamente, en esto que consiste en el rastreo y procesamiento de información relevante y la generación de conocimiento a partir del análisis de esa información. “Y con toda esta información se pueden generar mapas que nos permiten ver por dónde estamos transitando en lo tecnológico, en el desarrollo económico, comercial, normativo, competitivo, institucional. Es un conocimiento esencial para una planificación estratégica tanto de empresas como instituciones y gobiernos”.

Se espera que este esfuerzo interinstitucional sirva para fortalecer un proceso que permita dar seguimiento a las transformaciones de la agroindustria alimentaria argentina y debatir, en el marco del desarrollo nacional y regional, sus estrategias de innovación tecnológica e institucional a futuro.
Para acceder a la publicación del proyecto, ingresar aquí: http://www.mincyt.gob.ar/publicaciones-listado-tema/agroindustria-182