Cooperación Sur-Sur
La UNL contribuye a formar ingenieros en África
Viernes 4 de abril de 2014 / Actualizado el miércoles 9 de abril de 2014
Especialistas de la UNL participaron de un taller realizado en Angola para conocer y evaluar las características que presenta el contexto local en relación con el desarrollo sostenible de los recursos hídricos. Se apunta a formar especialistas en el tema.
En el marco de un convenio firmado en 2013 por la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y la Universidad José Eduardo Dos Santos (UJES), de Angola, docentes e investigadores de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH) visitaron ese país con el objetivo de conocer y evaluar las características que presenta el contexto local para la implementación de un plan integral de formación de técnicos y profesionales que apunte al desarrollo sostenible de los recursos hídricos y al fortalecimiento de las instituciones que gestionan el agua en ese país.
“Para la Universidad, este tipo de actividades está fuertemente relacionada con el Fondo Argentino de Cooperación Sur-Sur y Triangular (FO.AR) del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de la República Argentina. En los últimos 20 años, la UNL realizó un número importante de asistencias técnicas por FO.AR en diferentes disciplinas, en su mayoría hacia Centroamérica. Esta misión a África es muy significativa, ya que se encuentra estrictamente relacionada con las competencias universitarias de la UNL y con una carrera que ha sido pionera en Argentina, demandada desde Angola, lo cual nos enorgullece”, expresó el Secretario de Relaciones Internacionales de la UNL, Julio Theiler.
La presencia de la FICH-UNL responde a un pedido de la universidad angolana ante la falta de especialistas capaces de diseñar esquemas de evaluación, planificación, control y monitoreo de los recursos hídricos en ese país africano. “El problema central de Angola en esta materia es el bajo nivel de acceso al agua potable y saneamiento por parte de la población. Si bien cuenta con recursos hídricos aptos para su aprovechamiento, carece de profesionales que puedan manejar herramientas para su evaluación y gestión adecuadas, tales como un balance hídrico nacional que permita cuantificar su disponibilidad”, comentó Viviana Zucarelli, docente e investigadora que participó de la misión. “Tampoco poseen cuadros técnicos suficientes para realizar mediciones de manera sistemática. Este año tendrán por primera vez, luego de su independencia en 1975, un censo poblacional que indique, por ejemplo, cuántas personas acceden actualmente al agua potable”, completó José Macor, especialista de la FICH-UNL que también integró la comitiva.
La visita tuvo su corolario en un taller que se realizó en Kuito, capital de la provincia de Bié y ciudad sede de la Escuela Superior Politécnica de la UJES, que congregó a las máximas autoridades universitarias y gubernamentales, así como a más de 90 personas vinculadas al sector de agua y saneamiento. “Fue una actividad realizada en el interior de Angola, pero con una gran repercusión a nivel nacional, lo cual denota el fuerte interés de este país en avanzar en este proceso de cooperación. Además, demuestra que la intención de la Universidad no es trabajar unilateralmente con la UJES, sino en un plan de desarrollo sostenible de los recursos hídricos que integre los sectores académico, público y privado”, subrayó Mario Schreider, docente e investigador de la FICH-UNL.
Experiencia innovadora
Esta experiencia de cooperación es la primera que realiza la UNL en el continente africano. “Es un importante desafío porque de alguna manera contribuye a un cambio de paradigma en la cooperación internacional, demostrando que existen capacidades instaladas en el hemisferio sur que pueden ser aprovechadas por otros países en vías de desarrollo. En este caso, la UNL puede compartir 40 años de trayectoria en temas de recursos hídricos, pero adaptada a la realidad de Angola”, remarcó Schreider.
En efecto, la UJES encontró en la FICH-UNL las características de una formación de grado y de un perfil de egresado adecuadas a sus necesidades, con un fuerte acento en la capacitación para la gestión de los recursos hídricos.
“Angola cuenta con un Instituto Nacional de Recursos Hídricos que desea descentralizar regionalmente y con un plan nacional de cuencas que aún no puede ser desarrollado por falta de cuadros técnicos y profesionales formados con este perfil. En este sentido, encontrar respuestas a estas demandas de manera integrada con el sector académico es el objetivo principal de nuestra colaboración”, cerró el investigador.
Referente en recursos hídricos
La FICH-UNL cuenta con 44 años de trayectoria en enseñanza e investigación en temas de recursos hídricos. Desde 1974 se dicta la carrera Ingeniería en Recursos Hídricos, y a partir de la década de los 90, se incorpora a la oferta de posgrado el Doctorado en Ingeniería con mención Recursos Hídricos, la Maestría en Ingeniería de los Recursos Hídricos y la Maestría en Gestión Integrada de los Recursos Hídricos. Desde la década de los 80, los graduados en Ingeniería en Recursos Hídricos de la UNL ocupan lugares destacados en organismos públicos nacionales y provinciales ligados a la gestión del agua, como así también en empresas y universidades.