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El acto de asunción de Adrian Bonivardi y Maria Elida Pirovani, llevado a cabo desde las19 en el Salón de actos “Malvinas Argentinas” de la facultad, estuvo presidido por el rector Miguel Irigoyen y el decano saliente Enrique Mammarella. Estuvieron presentes el ex rector de la UNL y actual diputado Nacional Albor Cantard; el vicerrector electo Claudio Lizárraga, el miembro del Directorio de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica del MINCYT Eduardo Matozo, el decano de la Universidad Tecnológica Nacional Regional Santa Fe Rudy Grether, secretarios y decanos de la UNL, representantes de institutos de doble dependencia UNL-CONICET, entidades empresarias, gremiales y educativas, docentes, no docentes, graduados, estudiantes y público en general.

En primer término hizo uso de la palabra el decano saliente y rector electo, Enrique Mammarella, quien afirmó: “El legado más importante de cada uno de nuestros prohombres está en resignificar la construcción de una institución democrática y republicana. Y se debe poner de manifiesto lo que nos corresponde hoy, que pareciera un hecho común, trascendental y normal en nuestra institución: éste es el noveno periodo consecutivo de recambio de autoridades que, no es sólo el más largo en la historia de la institución casi centenaria que es la Facultad de Ingeniería Química, sino que representa casi la mitad de las posibilidades que tuvieron cada uno de los proyectos colectivos de hacerse carne en esta gran institución”.

Y agregó: “La institución fue grande y creció cada vez que hubo un proyecto democrático republicano. Sin dudas el legado a la nueva gestión, que no sólo forma parte de las autoridades sino también de todos los presentes, es seguir construyendo un proyecto democrático y republicano para toda nuestra universidad”. Finalmente, y tras ocho años de gestión, el Decano saliente agradeció a la comunidad el esfuerzo realizado e instó a “seguir construyendo, con ese compromiso de comunidad universitaria, la universidad pública”.

Por un proyecto inclusivo

Tras la firma de las actas correspondientes, Adrian Bonivardi asumió el compromiso de encabezar un proyecto institucional “inclusivo, que siga apostando al diálogo y poniendo siempre a la institución por encima de los intereses particulares”.

“Este es un año de celebración para todos los universitarios, puesto que conmemoramos el centenario de la gesta que forjó nuestras instituciones: la Reforma Universitaria de 1918.  Estamos también en la antesala del centenario de nuestra propia casa y de la Universidad Nacional del Litoral. En los próximos años estaremos interpelados por el presente, pero también por un futuro cada vez más complejo y dinámico, caracterizado por la vertiginosidad de los cambios”, señaló.

Y aseguró que “hoy más que nunca, estamos llamados a cimentar la Facultad de las próximas décadas, imaginar el futuro y convertirnos en artífices de su edificación. Ese será, sin dudas, nuestro mayor desafío”.

A continuación, el Decano electo aseguró: “es momento de profundizar la transformación que comenzamos en 2010, siempre sosteniendo el rol del Consejo Directivo como órgano central en la determinación de las políticas a largo plazo, amalgamadas con el Plan de Desarrollo Institucional de la UNL”.

“La planificación institucional y los espacios de participación continuarán siendo los garantes del crecimiento y el desarrollo de nuestra Facultad. En ello, la comunicación y el diálogo son herramientas fundamentales y necesarias, por lo que serán una prioridad en la gestión y en las tareas que todos los miembros de esta comunidad llevamos a cabo. El equilibrio necesario entre las necesidades, los intereses y las posibilidades primará a la hora de definir las políticas institucionales y la gestión eficiente de nuestros recursos”, destacó.

Fortalecimiento académico e institucional

En tanto, el Decano remarcó como prioridades el fortalecimiento de la integración institucional y académica con la Escuela Industrial Superior anexa a la FIQ, y el desafío de avanzar en la revisión de los contenidos de la oferta académica de FIQ junto con las metodologías educativas acorde a las nuevas formas de aprender y enseñar. “Es una meta formar profesionales hábiles, diestros para encajar en el engranaje del sector productivo, pero también lo es formar profesionales capaces de generar nuevas organizaciones productivas, crear empresas innovadoras, innovar en la articulación productiva. Para ello es fundamental y necesario el trabajo cooperativo entre diferentes disciplinas, incluyendo las de otras unidades académicas", añadió.

Potenciar los recursos

En lo referido al crecimiento en infraestructura, el Decano Adrian Bonivardi indicó que se continuará con el reacondicionamiento de los espacios existentes y la optimización del uso de los mismos, mejorando los espacios de enseñanza, plantas piloto y desarrollando laboratorios comunes centralizados capaces de adaptarse a las nuevas necesidades educativas, y a optimizar y potenciar los recursos propios. Asimismo, aseveró que se continuará trabajando fuertemente en la coordinación de la administración y uso del equipamiento científico compartido entre diferentes grupos de la unidad académica, con otras unidades académicas y con unidades ejecutoras de doble dependencia.

“Estas políticas deberán vincularse estrechamente con la formación de recursos humanos de grado y posgrado. Tenemos que incrementar las acciones para que la Facultad asuma un rol como asesora y/o consultora del sector público municipal, provincial y nacional en temas de nuestra especialidad, como así también realizar mayores esfuerzos en cuanto a la inserción en el territorio, la participación, desarrollo e implementación de políticas de extensión desde lo disciplinar y lo institucional”, continuó.

En este sentido, admitió que “la Facultad de Ingeniería Química ha sabido desempeñar un rol trascendente en la consolidación del sistema científico, tecnológico y productivo regional y nacional, por lo tanto no es menor la responsabilidad que nos compete en lo que refiere al desarrollo sustentable y eficiente, en el bienestar social y en la formación de profesionales que aporten a la construcción de una sociedad más justa e igualitaria”.

“Queremos seguir en ese camino y los convoco a formar parte activa de esta construcción, a ser parte de la continuidad de un proceso que pretende revalorizar y enaltecer a la Facultad de Ingeniería Química, a la Escuela Industrial Superior y a la Universidad Nacional del Litoral; porque no importan los espacios, sino las personas que los llenamos de vida, que los hacemos crecer y desarrollarse. Y que por encima de las individualidades, está el conjunto”, concluyó Bonivardi.

Quiénes son las nuevas autoridades

El decano de FIQ, Adrian Bonivardi, es Licenciado y Doctor en Química e Investigador principal de Conicet. Fue Director de Posgrado y RRHH de la UNL; en FIQ se desempeñó como director de las Licenciatura, Maestría y Doctorado en Química, Secretario de Ciencia y Técnica y Vicedecano. Además fue miembro titular del directorio del PTTLC por la UNL.

La vicedecana, Maria Elida Pirovani, es Ingeniera Química, Magister en Ciencia de los Alimentos y Profesora de grado y posgrado de la FIQ. Fue Directora de la carrera Ingeniería de Alimentos, jefa del Área de Conservación de Alimentos del ITA y Directora del Instituto de Tecnología de Alimentos (ITA).

La elección de las máximas autoridades de la casa de estudios se realizó el pasado 13 de noviembre como cierre de un proceso electoral que incluyó la renovación de representantes de los cuatros claustros.