En Esperanza
La Escuela Granja inició un nuevo ciclo lectivo e inauguró obras
Martes 10 de marzo de 2020 / Actualizado el martes 10 de marzo de 2020
El ciclo lectivo 2020 de la Escuela de Agricultura, Ganadería y Granja quedó inaugurado junto con las remodelaciones de la residencia estudiantil. El acto reunió a toda la comunidad educativa y a autoridades de la UNL.
En la Escuela de Agricultura, Ganadería y Granja de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) se inició un nuevo ciclo lectivo y con el corte de cintas oficial, se inauguraron las obras de remodelación de la residencia estudiantil, este lunes 9 de marzo.
El acto fue presidido por la vice-directora a cargo de la dirección de la escuela, Liliana Giménez, y el director de Planeamiento y Gestión Académica, Daniel Comba, en representación del rector de la UNL, Enrique Mammarella. También estuvieron el decano de la Facultad de Ciencias Agrarias, Norberto Gariglio; el decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias, Humberto Occhi; el director del Programa de Enseñanza Preuniversitaria, Héctor Odetti; el director de Planeamiento e Infraestructura Institucional de la EAGG, Rodrigo Benítez; el concejal Rodrigo Müller; docentes, personal no docente, alumnos y familiares.
Tras finalizar el acto protocolar, se procedió al corte de cintas y las personas que asistieron pudieron recorrer los dormitorios de la residencia estudiantil.
El ciclo lectivo 2020
Con la inauguración del ciclo lectivo 2020 de la EAGG se realizó la apertura formal del año académico de las escuelas preuniversitarias de la UNL. La especial bienvenida fue para los estudiantes que optan por cursar sus estudios secundarios en una de las “escuelas que tienen la particularidad de depender de una universidad nacional, que como tal es pública”, aseguró Comba. Además, esta casa de altos estudios es una “universidad centenaria, que nace en 1919, después del proceso de la Reforma Universitaria de Córdoba, que tuvo muchísimas implicaciones para la educación superior en América Latina y en Argentina, en particular, en nuestra universidad como hija dilecta de ese movimiento reformista” destacó.
Por su parte, durante el acto, la vicedirectora Liliana Giménez, recibió con una cálida bienvenida a los más de 250 alumnos que este año cursarán sus estudios secundarios en la escuela y recordó que la propuesta educativa de la EAGG “no está centrada solamente en los aprendizajes académicos sino muy especialmente en la tarea de afianzar y recuperar la vivencia y la transmisión de valores y principios humanos y éticos”. A su vez, señaló que este año la institución renovó el compromiso de buscar “las herramientas apropiadas para avanzar en el crecimiento institucional y hacerle frente a los diferentes desafíos que implica alcanzar cambios en la educación”.
En este sentido, mencionó algunos proyectos de la Escuela Granja para el 2020, entre los que se encuentran: la sustanciación de concursos docentes, la implementación del taller “Aprendiendo juntos” y de un proyecto de separación de residuos, la participación en actividades de Internacionalización y de movilidad estudiantil; la continuidad de los talleres de emprendedorismo y de las tareas de implementación del Sistema de Información Académico para Escuelas Preuniversitarias KIMKËLEN, el reacondicionamiento de las secciones didácticas y productivas, y la realización del proceso de evaluación institucional, entre otras propuestas.
Por último, invitó a los presentes a reflexionar sobre la defensa de una educación de calidad, valorando el aprendizaje como herramienta de cambio que posibilitará un futuro con proyectos, y alentó a todos los miembros de la comunidad educativa a mejorar democráticamente, desde sus posibilidades y responsabilidades, el espacio compartido.
Obras a inaugurar
En tanto, el director de Planeamiento y Gestión Académica, Daniel Comba, explicó que el ininterrumpido plan de mantenimiento y jerarquización edilicia de la Escuela Granja se inició luego de que todas las áreas de este complejo, creado en 1966 con “edificios donde prevalece la baja densidad, muy aptos para el desarrollo académico”, fueron relevadas. Como resultado, en los dos últimos años “se llevó adelante el recambio de la instalación eléctrica, comprendida desde los ingresos y acometidas, hasta la distribución en todas las áreas de la escuela. De esta manera se mejoraron las condiciones de seguridad para nuestra comunidad educativa, y se instalaron protectores y disyuntores en todos los tableros correspondientes a áreas académicas y de producción”.
Por otra parte, con una inversión de más de 2 millones de pesos, “la segunda etapa comprendió el recambio de las cubiertas de techos de todas las aulas y sectores administrativos, galerías y sectores complementarios, otorgándole al sistema total estanqueidad y la posibilidad de que los trabajos diarios de refacciones y pintura duren en el tiempo”. Sobre las tareas realizadas durante el ejercicio, destacó la concretada “puesta en valor del área de dormitorios, sectorizándolos, recambiando sus cubiertas de techos, y realizando refacciones y pintura interior que le otorgaran condiciones adecuadas de confort a nuestros estudiantes”. También se instalaron equipos de aire acondicionado: algunos nuevos y otros -los que provienen del proceso de puesta en valor de la manzana histórica- restaurados.