Salud
Evalúan el estado nutricional de niños santafesinos
Lunes 25 de octubre de 2010
Estudiantes y expertos de la UNL recopilan datos de menores de siete años a través de encuestas y mediciones antropométricas a menores de siete años. Además, proponen estrategias de educación alimentaria para mejorar la calidad de vida.
A través de mediciones simples, como el peso y la talla, y una encuesta nutricional, expertos y estudiantes de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) indagan sobre la salud de niños menores de siete años de la ciudad de Santa Fe. Además de obtener los datos que reflejan la realidad de distintos sectores, el equipo lleva adelante una propuesta de intervención que colabore a mejorar la situación actual.
“Es fundamental brindar Educación Alimentaria Nutricional (EAN) a los padres y miembros de la comunidad que contemple prácticas saludables de elección, preparación, distribución e higiene de los alimentos. Además, recalcamos la importancia de los controles periódicos de crecimiento y estado nutricional de los niños”, detalló Gimena Dezar, una de las integrantes del equipo de este proyecto de extensión universitaria.
Para lograr la evaluación antropométrica y nutricional de los niños confeccionaron una muestra con más de 30 escuelas, de las que participan los alumnos de los primeros y segundos grados (menores de siete años). “La muestra está definida en el proyecto como las instituciones que pertenecen a la zona de influencia del Hospital Iturraspe”, indicó Dezar.
Primera etapa
El trabajo incluyó, en una primera etapa, un censo en toda la población del barrio 29 de Abril que en el momento del relevamiento –en 2009– era de 146 viviendas. En cada una de las casas se realizó una encuesta socioeconómica, las mediciones antropométricas a los chicos y una encuesta de frecuencia alimentaria junto al recordatorio de 24 horas de las de comida realizadas por el niño. En total se aplicaron 123 encuestas socioeconómicas en las casas del barrio y se midieron 98 niños menores de cinco años.
La evaluación nutricional y antropométrica de los niños mostró que el 4,3% de los niños se encuentran en condición de desnutrición. Esto implica un valor superior al dato de la última Encuesta Nacional de Nutrición y Salud es del 3,8%. Otro indicador que describe la situación del barrio es el acortamiento, término utilizado para describir la baja talla en relación a la edad del niño. Mientras que a nivel nacional el acortamiento presenta un valor promedio de 4,2%, en el 29 de Abril es del 11,6%.
“Los resultados obtenidos con este trabajo fueron comparados con los de la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud, observando que los porcentajes obtenidos en el barrio fueron entre el doble y el triple que las condiciones nacionales”, analizó Dezar.
Ambos extremos
“Un chico puede tener una desnutrición aguda, es decir que está pasando por un momento de déficit, pero cuando se pasa a una desnutrición crónica, lo que muestra el chico hoy es resultado de un período prolongado y ése es el acortamiento”, explicó Sergio Arias, miembro del proyecto de extensión.
Pero la evaluación no se limita sólo a la condición de desnutrición. “Es interesante que no sólo hay más chicos con déficit nutricional sino que también coexisten, en las mismas circunstancias, un buen número de chicos con sobrepeso, lo que genera otro tipo de problemas”, señaló Juan Carlos Bossio, docente de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB). Como se ocupó de explicar, es un problema de disponibilidad y características alimentarias que puede expresarse en déficit y también en un mal equilibrio de la alimentación y por ello el niño tiene mayor peso del que debería.
“La pobreza es el lugar que aglutina a los que más déficit tienen y a los que más obesidad y sobrepeso presentan. Hay todo un problema de ordenamiento de la dieta”, resumió Arias.