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La autoría original se vuelve indiscernible en “Eva”, un trabajo fotográfico  que reúne setenta y uno retratos pertenecientes a diferentes fotógrafos de la región que se autoconvocaron con el objetivo de homenajear a la mujer y capturar con el lente de sus cámaras fotográficas instantes únicos que indagan a la figura femenina en diferentes situaciones y relaciones: madres, hijas, abuelas, en compañía o en soledad, con sus diferentes características físicas, tonalidades de piel, tallas y edades para al fin conformar una sola imagen, un solo cuerpo, una sola mujer.

“Queríamos plasmar todas las miradas que construyen a una mujer y demostrar cómo entre todos podíamos formar a esa mujer que vive en nuestra sociedad. Por otro lado, reflejar que todos tenemos una imagen o representación diferente del género. Para nosotros ‘Eva’ es una obra que plasma la belleza y la diversidad que hay en todas las mujeres”, señala Romina Lell una de las fotógrafas que participó en la creación de este acervo fotográfico.

El corpus de retratos que integran “Eva” es un reconocimiento a la mujer luchadora, a aquella que tras décadas de esfuerzos ha conquistado terrenos antes impensados y se planta en la sociedad con fuerza emancipadora: “decidimos fotografiar mujeres por la importancia que tienen en la sociedad, porque son creadoras de saberes, de espacios de movimientos sociales, por lo luchadora que es, porque somos grandes gestadoras de vida”, relata Lell. 

Por su parte, el nombre con el que fue bautizado el proyecto lejos está de ser azaroso: “elegimos llamarlo ‘Eva’ porque ella es la primer mujer y de alguna manera vive en cada una de nosotras”.

Los protagonistas

El proyecto toma forma a partir de un encuentro espontáneo de fotógrafos de la región: “somos muchos los que estudiamos fotografía, nos conocemos de ahí y nos fuimos autoconvocando. Terminamos siendo más de treinta personas, incluso había gente más grande que quería participar, pero por una cuestión de edad no lo pudo hacer”, relata Romina y revela que “entre todos fuimos rumbeando a nuestra Eva, todos laburamos de manera equitativa, aportando ideas, eligiendo las imágenes para armar este rompecabezas”.

El proyecto que todavía no vio la luz podrá conocerse en septiembre,  en la celebración de una nueva edición de la Bienal de Arte Joven donde, además, podrán apreciarse otras instalaciones, obras y piezas de arte seleccionadas para la ocasión.