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Estuvo organizado por la Universidad Nacional del Litoral (UNL), en conjunto con el  Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Santa Fe, y se propuso reflexionar sobre la vocación de emprender y cómo la educación emprendedora es prácticamente indispensable en este proceso.

Contó con la exposición de María Rosa Sanchez Rossi, Magister en Comercialización Internacional y Conductora de la Maestría en Administración de Empresas de la UNL; y de Federico Mazzón, Coordinador del Programa de Emprendedores de la UNL, Especialista en Strategic Managment, Director de Finanzas de Keetup SRL, y

Pedagogía Emprendedora

Entendiendo que emprender es el fruto de una decisión y que el proceso requiere que las competencias se generen desde el inicio de la vida académica, Sánchez Rossi  sostuvo “la educación emprendedora constituye un verdadero desafío para el sistema educativo, especialmente para las universidades que deben responder a las demandas del medio”.

Con  respecto a las competencias necesarias para  comenzar a emprender  y las herramientas que se requieren para ello,  detalló “que la mayoría de las cualidades y aptitudes emprendedoras se pueden desarrollar, a través de la pedagogía emprendedora, la cual tiene que atravesar todo el sistema educativo” Y agregó “a nivel social, se estimula la creación de empresas y de empleos así como también el crecimiento sostenido; y, a nivel individual, estimula el desarrollo personal, la autoconfianza, y la autogestión, entre otros aspectos”.

Una experiencia institucional

Por su parte, Mazzon compartió las líneas que viene llevando adelante el Programa Emprendedores de la UNL, el que tiene ya diez años desde su puesta en marcha, destacando la  importancia de que la formación emprendedora se aborde en términos de procesos  institucionales sostenidos y no experiencias aisladas.  “La trayectoria de la UNL de sostener una política de promoción del emprendedorismo, habla de estar convencidos de la importancia estratégica que comporta, tanto en el entorno socioeconómico como en el desarrollo personal”, manifestó.

Asimismo, puso en común una experiencia reciente llevada a cabo desde la UNL, en el marco de la Cátedra Formación de Emprendedores: “se articuló con los primeros grados de la escuela primaria, obteniendo resultados sorprendentes, a partir de darles a los chicos, espacio para que expresen toda la creatividad. Y hubo un intercambio en donde los emprendedores fueron tomando las ideas que planteaban los niños, para llevarlo a una instancia de prototipado. Esto habla de pensar en otros modelos con el sistema educativo” enfatizó.