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La decana de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB), Adriana Ortolani, y el secretario de Vinculación y Transferencia Tecnológica de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), Javier Lottersberger, se reunieron con representantes del Laboratorio Industrial Farmacéutico S.E. (LIF). El encuentro se realizó en la Sala del Consejo Directivo de la Casa de Estudios con el objetivo de mostrar las potencialidades del Laboratorio de Espectrometría de Masas que se encuentra emplazado en la Facultad y que permitiría optimizar los procesos de calidad del Laboratorio de medicamentos de la provincia.
Estuvieron presentes, el secretario académico y director del Departamento de Bioquímica Clínica y Cuantitativa, Guillermo Ramos; el director del CETRI Litoral, Christian Nemichenitzer, el secretario de Relaciones con el Medio de la Facultad de Ingeniería Química, Lucas Bruera; la responsable de Vinculación Tecnológica de la FBCB, María Victoria Luque, y la operadora del equipamiento de alta complejidad, Ana Clara Lorenzi. Por el LIF asistieron, uno de sus directores, Diego Bruno, y los responsables de Calidad, Silvina Mugni, y de Vinculación Tecnológica, Sebastián Macies.
“Con el LIF tenemos una larga historia de trabajo compartido, este encuentro es una gran oportunidad para que conozcan nuestras potencialidades actuales como proveedores de servicios y al mismo tiempo, lograr concretar un proyecto de trabajo que nos permita afianzar nuestra relación. Hoy ya trabajamos con clientes de la industria farmacéutica por lo cual estamos muy preparados para ofrecerles un  servicio de análisis de los microorganismo por espectrometría de masas contando con una base de datos muy completa”, afirmó Ortolani.
Por su parte, Bruno sostuvo “nuestra intención es convertirnos en un socio estratégico, tenemos una extensa trayectoria de trabajos conjuntos. Hay una comunión que estamos dispuestos a mantener y consolidar a través de futuros proyectos”.

Acerca del servicio
Durante la reunión Lorenzi realizó una explicación técnica del funcionamiento del cromatógrafo líquido bidimensional con generador de spots, acoplado a un espectrómetro de masas tipo MALDI-TOF, y del método de validación microbiológico que le permitiría al LIF optimizar sus procesos internos de calidad.
Sobre este servicio que ofrece la UNL, Lottersberger explicó: “el equipo cuenta con un comité de expertos de cada grupo de investigación, que aporta un valor agregado cuando se dan casos complicados. Este equipo está conformado por especialistas formados en la Facultad y fuera del país, entonces cuando aparece un hongo o bacteria difíciles de identificar, se arma una red interna para poder resolver la mayor cantidad de casos y así brindarles un mejor servicio”.
Al finalizar la reunión, el personal de LIF, fue invitado a una visita técnica al Laboratorio de Espectrometría de Masas donde pudieron observar el procedimiento de separación e identificación de un microorganismo ambiental como parte del proceso de control calidad de una línea farmacéutica.