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A través de la firma de un convenio, suscripto por el presidente del Colegio de Arquitectos de Santa Fe, Rubén Marcelo Molinas; y el rector de la UNL, Albor Cantard, la organización de profesionales, se incorporó a la Comunidad de Padrinos de la Universidad que contribuye a la realización de actividades educativas, culturales y deportivas. 

La actividad se llevó a cabo en el despacho del Rector, el pasado lunes 31 de agosto.  También participaron del acto de firma, la tesorera del Colegio de Arquitectos, Analía Giura; el secretario de Vinculación Tecnológica y Desarrollo Productivo, Eduardo Matozo; el decano y vicedecano de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU), Carlos Rubén Sastre y Sergio Guillermo Cosentino; el director de Desarrollo Productivo, Julio Talin; el coordinador del Programa Padrinos, Sebastián Rossin y la secretaria de Extensión de la FADU, Raquel Airaudo. 

La firma de este convenio integra una nueva organización al Programa, que ya suma 113 Padrinos. Por otra parte, aporta al fortalecimiento de ambas instituciones, ya que representa la confirmación institucional de un vínculo que ha nacido y crecido, desde los orígenes de ambas instituciones. Profundiza la relación que hace muchísimo tiempo la UNL, y particularmente la FADU, tiene con el Colegio de Arquitectos de Santa Fe, orientada al sostenimiento de un compromiso social de ambas instituciones, en la revalorización de la educación pública, y la transformación de las condiciones sociales y colectivas.

Al respecto, el Decano de FADU, destacó que se trata de “un acto de profundo simbolismo, ya que fuimos creados en la misma época  en que la democracia había vuelto al país. Pero, al mismo tiempo,  refuerza el trabajo de hace años, vinculado a la interacción de  lo que cada institución puede aportar”. 

Por su parte, el presidente del Colegio de Arquitectos de Santa Fe calificó la jornada como “muy importante y muy gratificante para el Colegio, al incorporarse al grupo de Padrinos de la UNL. Y agregó, “es sabido que la UNL, a través de la FADU, es una de las grandes proveedoras de recursos humanos para la región, en lo que hace a la arquitectura. Va de suyo, entonces, que sea casi natural que esta relación deba darse. Hace tiempo venimos trabajando en actividades en conjunto de capacitación, de formación, y otras tantas que suponen la articulación entre el ámbito profesional y el ámbito académico, y de alguna manera esto sirve para dar un paso en la consolidación de esta relación”. 

Interrelación institucional 

El convenio pone un marco a una relación construida entre ambas instituciones, que se ha nutrido de los aportes que cada una pone a disposición para llevar adelante acciones en conjunto.  La UNL, a través de FADU, ofrece el conocimiento que se genera a través de la investigación, las tareas de acciones coordinadas y vinculadas a la extensión y a la formación de grado. Por otra parte, la relación con el Colegio pone luz sobre nuevas realidades de la tarea profesional, para, a partir de ahí, pensar los currículums, la relación de cuarto nivel, la planificación de cursos de capacitación profesional, de perfeccionamiento, especializaciones, y la oferta académica de posgrado que la UNL pone a disposición de los matriculados. A su vez,  el Colegio constituye una suerte de yacimiento de temas, de las preocupaciones que surgen de los profesionales. 

El Presidente del Colegio, afirmó que “siempre hay actividades en carpeta proyectadas que tienen que ver con compartir referentes de la arquitectura, que puedan dictar cursos en la universidad, como charlas en el colegio y de ahí, compartir eventualmente estas experiencias, como otras tantas que surgen de convenios entre cátedras y miembros matriculados del colegio. El convenio confirma el vínculo existente y sigue adelante, imaginando nuevas relaciones”, expresó.