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La Universidad Nacional del Litoral (UNL), junto al Conicet y la empresa Bioceres, recientemente recibieron dos nuevas patentes internacionales por la utilización del gen Hahb-4 en la obtención de plantas tolerantes a sequía y la salinidad. Las patentes son de parte de la India y de Australia.
Este nuevo registro de propiedad intelectual deviene de un trabajo de investigación que llevan adelante un grupo de investigadores bajo la dirección de Raquel Chan. La investigación se gestó en el ámbito de la cátedra de Biología Celular y Molecular de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB), comprendida en el actual Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (IAL) y se desarrolló por un convenio firmado en 2003 entre la UNL, el Conicet y Bioceres para avanzar en la caracterización funcional del gen y su valoración en aplicaciones biotecnológicas.
Estas dos patentes se suman a la que las instituciones obtuvieron en 2010 por parte de los Estados Unidos y a las que ese mismo país les concedió a los proyectos Cox-5c y Hahb10 en 2009.

Continuidad del trabajo
En la actualidad, Bioceres –a través de INDEAR– evalúa la tecnología a campo, con resultados alentadores en los tres cultivos a los que ha incorporado esta solución: trigo, soja y maíz. En paralelo, la multinacional Advanta licenció en 2009 esta tecnología  para su desarrollo y explotación comercial a nivel mundial en los cultivos de sorgo, arroz, canola, mostaza y algodón.
La empresa también ha presentado solicitudes de patentes sobre esta invención en otros países como México, Brasil, China, y en Argentina, de las cuales espera su pronta concesión. Recientemente se han presentado ante el Instituto Nacional de Propiedad intelectual de India las solicitudes divisionales correspondientes a la patente de Hahb-4 para su evaluación.