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Durante la tarde del pasado viernes, el rector Miguel Irigoyen, los secretarios y directores de áreas centrales, decanos y titulares de Centros Universitarios se reunieron en el Hotel UNL-ATE junto a la comitiva de CONEAU que a lo largo de cinco días visitó la UNL y mantuvo encuentros con todos los actores de la comunidad universitaria tras la finalización de la Tercera Autoevaluación Institucional. El Comité de Pares Evaluadores estuvo compuesto por Eduardo Miguez, Mario Leal, Cristina Plencovich, Juan Carlos Rossell y Ricardo Guiterrez. En tanto, la consultora especialista en Bibliotecas fue Norma Mangiaterra y la especialista en TICs fue Alejandra Zangara.

“Al terminar la semana de trabajo y luego de un taller interno, se realizó el acto habitual de devolución sobre las primeras conclusiones de la visita. Allí está estipulado que las autoridades de la universidad escuchen a la delegación visitante con sus primeras impresiones sobre el proceso de Autoevaluación. Por regla no se generan anticipos ni juicios evaluativos pero sí una semblanza general por parte de los pares de la experiencia vivida, y una apreciación preliminar sobre la marcha de la universidad”, comentó el secretario de Planeamiento de la UNL, Adolfo Stubrin.

Sobre las actividades desarrolladas por los miembros de CONEAU entre los días 26 y 30 de septiembre, describió que “las reuniones y convocatorias abiertas fueron muy exitosas, todos los estamentos contaron cómo fueron los últimos seis años, los avances obtenidos, los objetivos a cumplir y las tareas pendientes. Fue una semana provechosa y fructífera, exigente para los visitantes y la comunidad universitaria por la cantidad de reuniones y por cómo tuvimos que prepararnos para la visita. Estoy seguro que este esfuerzo va a rendir frutos muy importantes”. Y añadió: “Los pares destacaron especialmente el Plan de Desarrollo Institucional (PDI). Este tercer proceso de Autoevaluación Institucional y Evaluación Externa nos sitúa en la vanguardia en el cumplimiento de esta obligación legal: el proceso se hizo a los seis años del segundo, de manera que estamos en el ritmo temporal previsto por la reglamentación de la ley. Queda el cumplimiento del último trienio del PDI, el puente que tenemos tendido hacia la celebración del centenario de la UNL”.

“Se pudo hacer una transmisión muy fidedigna y perspicaz que los pares convertirán en una interpretación que será volcada en un informe de Evaluación Externa, que esperamos recibir en diciembre. Dicho informe nos dará insumos críticos para dirigir nuestras acciones en esta última etapa, y de esa manera ir culminando con los objetivos que nos trazamos en la misión en 2010, cuando la Asamblea Universitaria aprobó los documentos políticos fundamentales del PDI”, valoró el secretario de Planeamiento de la UNL.

Respecto al encuentro final con los pares de CONEAU, Adolfo Stubrin acotó: “Fue una reunión muy productiva e interesante. Los cinco pares dejaron traslucir un interesante conjunto de análisis sobre la marcha de la UNL, cada uno desde su perspectiva especializada. Quienes asistimos reafirmamos la sensación de lo que realmente fue la Tercera Autoevaluación Institucional: un proceso de reflexión profunda, con apoyo de este grupo externo que conoció a la UNL en profundidad a partir de esta semana de trabajo”.

“La TAI me deja varias sensaciones: la Autoevaluación es un proceso de reflexividad, espero que mucha gente se haya sentido involucrada. Entre los meses de mayo de 2015 y 2016 hubo un conjunto de actividades autoevaluativas en de las facultades, con talleres; y a nivel de la universidad con encuestas, grupos focales, reuniones, una Comisión Organizadora y un Comité de Gestión formado no sólo por las autoridades dependientes del Rector sino también por representantes del Consejo Superior de todos los estamentos, con quienes hemos trabajado de manera colegiada y concertada. Hemos averiguado muchísimas cosas sobre el entorno social de la Universidad, sobre sus actores principales y hemos chequeado la marcha del PDI, sus logros y sus aspectos aún no realizados, de manera que se ha estrechado la relación de por sí muy asociada que tiene a Autoevaluación Institucional con el planeamiento”, concluyó el Secretario de Planeamiento.

Las dimensiones evaluadas

El proceso de Evaluación Institucional está definido en el artículo 44º de la Ley de Educación Superior Nº 24.521 y comprende dos fases: una de Autoevaluación Institucional y otra de Evaluación Externa. La primera Autoevaluación Institucional de la UNL tuvo lugar entre 1996 y 1998 y fue el punto de apoyo para el Plan de Desarrollo Institucional (PDI) 2000-2009. La Segunda Autoevaluación se desarrolló entre 2006 y 2008, concretándose la Evaluación Externa en el año 2010, y sobre esa base se aprobó a fines de 2010 el PDI 2010-2019 “Hacia la Universidad del Centenario”, actualmente en ejecución.

Las dimensiones sobre las que trabajó la Autoevaluación 2015-2016 son siete: Contexto local y regional; Misión y Proyecto institucional; Gestión Académica; Investigación, Desarrollo y Creación Artística; Extensión, Producción de Tecnología y Transferencia; Integración e Interconexión de la Institución Universitaria; Biblioteca y Centros de Documentación.

La Autoevaluación Institucional buscó generar consensos con respecto a las prioridades y estrategias a asumir en los plazos mediano y largo; además favoreció la puesta en común de diagnósticos y análisis para interesar a diferentes actores universitarios en los problemas u objetivos pendientes que son identificados por una Facultad, Centro Universitario o por la Universidad en su conjunto.