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Se realizaron las primeras actividades del proyecto “Estrategias para el cambio a un estilo de vida más saludable en escuelas de Rafaela” de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) en las escuelas N° 428 “Luisa Raimondi de Barreiro” y N°476 “Juan Bautista Alberdi”.

Frustración y aburrimiento fueron algunos de los temas que se abordaron en la charla que Mariano Cordera, licenciado en psicología, compartió con unos 70 alumnos de segundo año de la escuela secundaria. En su presentación, el especialista invitó a los adolescentes a reflexionar sobre el valor de esas emociones, como motor del movimiento y de la generación de algo nuevo.

El especialista ejemplificó como incluso la industria de los videojuegos, a través del modo en que se gestionan las vidas, ha hecho que no haya que enfrentarse a momentos de frustración al jugar. El llamado del profesional, en cambio, se orientó a trabajar la capacidad de frustración y de aburrimiento ya que “hacer solo lo que nos gusta no siempre es saludable”, afirmó.

La charla recorrió otros temas incluida la autoexigencia, el amor y la importancia de la socialización. “Elegimos comenzar con este tema por la necesidad de encarar lo saludable de manera integral, que va más allá del cuerpo, de las calorías o de los índices de riesgo. Lo que estamos tratando de hacer es un aporte para vivir bien”, explicó María Cecilia Fabiano, docente de la Facultad de Ciencias Médicas (FCM) de la UNL y directora del proyecto.

Por su parte, Fabiano dio comienzo a la participación de la escuela Alberdi con dos de los sextos grados. Junto con los alumnos y los docentes se generó un espacio de diálogo para conocer sus prácticas y significaciones en torno, en este caso, al desayuno. Las acciones futuras se orientan a dar respuesta a los interrogantes planteados así como a explorar alternativas que puedan ayudarlos a elegir modificar hábitos.

Con esta propuesta se busca involucrar a diferentes segmentos de las comunidades escolares con una mirada multidisciplinar. “No se trata sólo de realizar una actividad con un grupo y continuar sino de acompañar, construir un vínculo que pueda aportar a la calidad de vida, desde los estudiantes hasta el personal no docente”, destacó Fabiano.