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Con el objetivo de continuar sembrando estas inquietudes emprendedoras en los alumnos de la casa de altos estudios, se dio inicio a un nuevo ciclo de la Cátedra Formación de Emprendedores, donde se parte de un trabajo motivacional, aptitudinal y actitudinal para incentivar la innovación, la creatividad y trabajo en equipo. También tiene como objetivo mejorar la inserción en el medio socio-productivo.
La cátedra se dicta en Santa Fe, en la Facultad de Ciencias Económicas, y en Reconquista, en el Centro Universitario Reconquista Avellaneda.
Soledad López Cuesta, coordinadora del Programa Emprendedores de la UNL, presentó los contenidos ante los alumnos que de diferentes facultades participan de esta edición, incluyendo alumnos extranjeros que cursan este cuatrimestre la universidad. Durante la presentación comentó: “lo que nosotros planteamos es una alternativa profesional, por ejemplo, un estudiante de ciencias económicas con un perfil tradicional tiene como orientación trabajar en un estudio impositivo o en administración pública, aquí le planteamos que reconozcan una alternativa más, generando su propio emprendimiento”.
Para culminar la presentación Lopez Cuesta agregó “esperamos que el día de mañana, luego de trascurrido algunos años en su vida laboral, lo puedan capitalizar haciendo algún proyecto, prestando su competencias a otros y que ese trabajo interdisciplinario le pueda permitir, por ejemplo, que un contador que maneja la parte económica o fiscal de un proyecto pueda colaborar con un técnico, con un ingeniero con un tecnólogo y llegar cada uno a aportar las competencias para que sea exitoso el proyecto. Es una formación complementaria al perfil profesional”.

Primer día
Lic. Andrés Katz, sociólogo, especialista en Coaching de la Universidad de Barcelona y docente la una Facultad de Ciencias Económicas de la UNL, fue el encargado de abrir la cátedra con su presentación “el perfil emprendedor, las habilidades distintivas”.
El disertante explicó que no hay un perfil definido de como es un emprendedor, pero que reúne ciertas características que lo distinguen de cualquier otro trabajador. “La visión de futuro desplegada en concreto en la cotidianidad estarán vinculadas a habilidades de insistencia, negociación, comunicación; habilidades que están relacionadas al encantamiento con un proyecto más allá de las dificultades, cuando uno insiste en un proyecto y en una idea y en una mirada, seguramente está más cercano a alcanzar lo que busca”.