Gestión 2018-2022
Asumieron las nuevas autoridades de la UNL
Viernes 9 de marzo de 2018 / Actualizado el viernes 9 de marzo de 2018
Enrique Mammarella, como rector y Claudio Lizárraga como vicerrector, tomaron posesión de sus cargos. Fue en un acto realizado en el Paraninfo. “Recibimos una Universidad que ha dado sobradas muestras de su madurez institucional.”, manifestó el rector.
En un Paraninfo colmado, Enrique Mammarella y Claudio Lizárraga asumieron como rector y vicerrector, respectivamente, de la Universidad Nacional del Litoral (UNL). Fue en un acto realizado este viernes 9 de marzo a la mañana, que estuvo presidido por el rector saliente Miguel Irigoyen. Las nuevas autoridades estarán al frente de la casa de estudios por el período 2018-2022.
“Hoy, gracias a las convicciones, esfuerzo y compromiso de quienes nos precedieron recibimos una Universidad que se destaca por una trayectoria centenaria que ha dado sobradas muestras de su madurez institucional”, expresó Mammarella en su discurso.
“Madurez sustentada en condiciones estables de gobernanza que han sido su rasgo distintivo en el sistema universitario argentino y que le han permitido asumir posiciones de liderazgo en diversos aspectos que configuran las funciones sustantivas y las misiones universitarias”, continuó el flamante rector de la UNL.
En el acto se realizó la firma de la toma de posesión de los cargos por parte de las nuevas autoridades. Estuvieron presentes los ex rectores Albor Cantard -actual diputado nacional- y Juan Carlos Hidalgo; autoridades nacionales, provinciales de Santa Fe y de provincias vecinas, municipales y de otros municipios y universitarias del litoral, de otras universidades públicas del país, de empresas, gremiales y estudiantes, docentes, no docentes y graduados.
El primero en tomar la palabra fue el rector saliente Irigoyen quien consideró que “Educar es construir futuro” haciendo alusión a esta nueva gestión que está por comenzar. “Este momento pone de relieve la trayectoria de Mammarella y Lizárraga en esta Universidad”.
Además, hizo referencia al centenario de la Reforma de 1918 y al centenario de la UNL “con la idea de resignificar sus valores con las nuevas demandas de la sociedad actual”.
Finalmente, Irigoyen hizo referencia al trabajo hecho hasta ahora con el ex rector Albor Cantard: “No fue realizado solo por dos personas sino que se trabajó en conjunto con los diferentes actores de la Universidad. Y de allí un agradecimiento muy especial a toda la comunidad universitaria de la UNL”.
Lineamientos de la nueva gestión
Luego de la firma se realizó el cambio de lugar en el estrado, como símbolo del inicio de esta nueva gestión. Allí, durante su discurso Mammarella dejó ver cuáles serán las líneas de gestión para los próximos cuatro años de la Universidad. Aseguró que la UNL parte del “ideario que la Reforma Universitaria ha legado para la posteridad” y del compromiso de trabajar “por una universidad que se asuma ‘reformista’ y no ‘reformada’”.
Según el nuevo rector el gran desafío es “pensar en una permanente transformación de la universidad en respuesta y consonancia a los complejos escenarios sociales, políticos, económicos y culturales que plantea la sociedad contemporánea”. Y para lograrlo implica “poner en juego la imaginación, pero sobre todo, la capacidad de interpelar, de reflexionar y de replantearnos los objetivos, las misiones y las funciones de la universidad. Poner en juego la capacidad de pensar en una idea de universidad ajustada a la realidad de nuestros tiempos y a la vez, capaz de imaginar e interactuar con un futuro al que está inevitablemente llamada a construir”.
Dentro de los lineamientos destacó las tres funciones sustantivas de la Universidad -educación, investigación y extensión- y consideró que muchas veces se entienden por separado pero para esta gestión “suponen una articulación y una retroalimentación entre sí con un objetivo que no debemos perder de vista: se trata de la misión central de la universidad, esto es formar, además de profesionales, a ciudadanos comprometidos socialmente”.
Por tanto, una equilibrada integración entre estas funciones sustantivas, “contribuirá de manera significativa a una mejor calidad y pertinencia universitarias, una permanente actualización de los procesos de enseñanza y aprendizaje, a la generación de nuevos y valiosos conocimientos y a la apropiación social de éstos, y a concentrar esfuerzos para una mayor inclusión y cohesión social y cultural, especialmente de los sectores más vulnerables de la sociedad”.
Democratización del ingreso y la permanencia
Otro de los puntos en los que hizo hincapié el flamante rector fue el desafío de la democratización del ingreso y la permanencia. “El ingreso a las universidades es directo y parece allí darse por concretado el principio democrático de garantizar el acceso a la educación. No obstante, una gran parte de nuestros jóvenes no logran acceder a la Universidad”, sostuvo y agregó: “La Universidad debe contribuir a analizar con detenimiento los fenómenos de exclusión y a determinar las carencias, barreras, contradicciones y dilemas existentes que obturan la igualdad de oportunidades frente al acceso a la educación superior”.
En este sentido, consideró que “la Universidad debe trabajar en propuestas y alternativas útiles que sirvan a las políticas públicas tendientes a solventar esas carencias, eliminar esas barreras, resolver esas contradicciones y superar esos dilemas, con la firme convicción que la educación es y debe ser el medio para reducir las desigualdades y la exclusión en la sociedad”.
Finalmente sostuvo que “no solamente debemos velar por el desarrollo de infraestructura accesible en cada uno de los asentamientos de la UNL; sino también, debemos garantizar el acceso y permanencia de estudiantes con discapacidad, lo que nos interpela a delinear más y mejores estrategias en torno a lo edilicio, la preparación de nuestros docentes para acompañar los procesos de inclusión y la generación de materiales de estudios adecuados, en formatos accesibles, que persigan un objetivo de equidad dentro de la UNL”.
Financiamiento
El rector también expresó su postura con respecto al financiamiento de la Universidad Pública al decir que “sostenemos como bandera que es una responsabilidad indelegable del Estado el brindar un financiamiento adecuado para el logro de sus funciones. Si depositamos en la educación, la investigación científica, la innovación y el desarrollo tecnológico, la expectativa por la equidad y la igualdad en el crecimiento y el desarrollo de nuestro pueblo y nuestra nación, no hay lugar a dudas que no se trata de un gasto, sino de una inversión”.
Generación de conocimientos
Con respecto a las fortalezas que la UNL ya tiene en áreas y temas de investigación, Mammarella consideró que “éstas deben ser la referencia para aquellas que se están consolidando o iniciando, ideando estrategias que permitan articular los avances y desarrollos que sobre similares temáticas se ejecutan en diferentes Facultades, Centros o Institutos”.
Sin esta adecuada articulación, sin un abordaje interdisciplinar de determinadas problemáticas complejas, “los avances y las respuestas a demandas sociales y productivas que la Universidad pueda dar, serán siempre de menor impacto o alcance”.
En tanto “las actividades de investigación deben profundizar su perfil orientado a la solución de problemas sociales y del medio productivo, entendiendo que la co-producción de conocimientos con actores sociales o productivos, los vínculos con actores estratégicos de la región y el mundo en materia de investigación, desarrollo y extensión, son centrales al momento de planificar el desarrollo en ciencia y tecnología que realizará la UNL en los próximos años”, resumió el rector.
Finalmente, Mammarella convocó a los estudiantes, docentes, personal no docente, graduados y jubilados de la UNL a “trabajar unidos de verdad, con voluntad de ser y querer, incorporando el talento, la experiencia y la formación académica de cada uno, con participación activa, con rigor en el trabajo y con disciplina. Necesitamos, entonces, de la integración de todos para alcanzar las metas propuestas, construyendo colectivamente la universidad y poniendo a nuestra Universidad Nacional del Litoral al servicio de ese país mejor”.