Producción hortícola
¿Por qué la lechuga es más cara en verano?
Viernes 8 de febrero de 2008
Las altas temperaturas y la intensa radiación solar diminuyen la cantidad y calidad de la producción de las verduras de hoja, lo que se traduce en un incremento de los precios. La lechuga es la más vulnerable.
El verano es la temporada donde más se aprecia una fresca ensalada, sin embargo para las verduras de hoja el calor excesivo es perjudicial. “Estas verduras son de clima templado a frío. Acá se pueden producir bien en otoño, invierno y primavera, pero cuando llega el verano tienen problema con las temperaturas altas”, explicó el Ing. Agr. Juan Carlos Favaro docente de Horticultura de la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL).
“La temperatura alta produce una disminución del crecimiento -la planta crece más lentamente- pero a su vez, cuando el calor es extremo, provoca daño directo porque se queman las hojas”, agregó Favaro.
Como consecuencia del estrés térmico al que se someten estas plantas en los duros veranos santafesinos, disminuye la cantidad de la producción así como su calidad. Al disminuir la oferta local se incrementan los precios ya que sólo se dispone de mercadería comprada en zonas más frescas como Mar del Plata, donde las condiciones son menos hostiles.
“Esta es una situación recurrente en los meses de enero y febrero en esta zona. Lo que ocurre es que el consumidor se ha acostumbrado a una determinada calidad”, manifestó el especialista y agregó: “Este problema es habitual pero unos años atrás no había la posibilidad de comunicación y de transporte que tenemos hoy que permite acceder a la producción de otras zonas más frescas. Antes los santafesinos consumían lo que se producía en esta zona aunque no era de la calidad que hoy tiene la producción que ingresa de otras zonas. El consumidor se ha puesto más exigente en cuanto a la calidad porque tienen mejores productos a su disposición”.
Mucho sol, mucho calor
El factor climático de mayor relevancia para la producción en temporada estival es la temperatura. “No todas las verduras de hoja se ven perjudicadas de la misma forma. La más afectada normalmente es la lechuga que es la planta más delicada de todo ese grupo”, comentó Favaro.
Para mitigar los efectos de la radiación solar existe tecnología disponible pero su incorporación es paulatina por los costos de inversión. “El uso de mallas de sombreo y los sistemas de riego por goteo mejoran muchísimo la situación”, aclaró el especialista.
El riego por goteo hace a los cultivos menos vulnerables a las sequías, porque le permite al productor regular esa variable.
Producción santafesina
El cinturón hortícola más cercano a la ciudad de Santa Fe está ubicado en la zona de Recreo, Monte Vera, Ángel Gallardo y Santo Tomé. Las verduras de hoja que allí se cultivan son lechuga, acelga, espinaca, achicoria, entre otras. Actualmente, esta producción tiene como destino el abastecimiento regional.
“Hace unos años atrás era mucho más importante a nivel nacional pero hoy por hoy la superficie se ha reducido bastante. Son unas 1500 hectáreas las que están en cultivo y básicamente abastecen al mercado de Santa Fe. Lo que pasa es que este mercado, a su vez, provee a otras provincias como Chaco, Corrientes y Misiones”, indicó Favaro.
Por último, cabe destacar que existen otros factores además de los climáticos que restringen la oferta de hortalizas. De acuerdo con el informe de "Análisis de la oferta y precios de hortalizas en función de las principales variables climáticas 2007" emitido por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos de la Nación: "Es preciso destacar que la producción [hortícola] no fue ajena al avance simultáneo de la agricultura extensiva y de la urbanización sobre regiones que tradicionalmente se destinaron a la producción de hortalizas".