La Manzana Histórica expresa los cambios y las permanencias propias de su tiempo. El estilo arquitectónico es ecléctico, ya que reúne elementos provenientes del neorrenacimiento e influencias de la arquitectura de origen árabe en España, en tanto que algunos detalles refieren a variaciones estilísticas de la vertiente neocolonial, que por entonces utilizaban arquitectos en el país como una de las opciones modernistas frente al historicismo del siglo anterior, todavía activo.
El Rectorado sigue un estilo neocolonial ecléctico, con varios elementos de otras corrientes. El frente tiene motivos zoomórficos – en las estatuas y dragones–, guardas geométricas, medallones.
En la fachada principal, el balcón recupera elementos del renacimiento italiano. Alzando la vista se observa el reloj, acompañado por dos esculturas, copias de “La aurora” y “El crepúsculo”, en un homenaje a Miguel Ángel, que realizó esas figuras para la tumba de los Médici, en Florencia.
En el centro del hall del Rectorado se destaca la rosa de los vientos, utilizada para guiar a los navegantes, que en ese espacio simboliza el rol que debe tener una institución del saber.
La construcción del Paraninfo demandó ocho años. El salón tiene techo de cielorraso policromado del artista Francisco Santos, de Buenos Aires. Su ubicación privilegiada en el eje de la simetría se materializa con un ingreso en franca relación con el hall recortado mediante una doble escalinata monumental.
En el edificio de la FCJS conviven innumerables imágenes y manifestaciones: su fachada remite al monasterio El Escorial (España), mientras que los Patios de los Naranjos con sus fuentes de agua, evocan la tradición musulmana, con claras referencias a los granadinos Jardines del Generalife de la Alambra.