Como vimos en ejes anteriores, la ciencia es una empresa intelectual que necesariamente se desarrolla entre muchas personas, y mejor aún si un equipo se conforma con científicos de diferentes áreas del conocimiento. Y esta preferencia se se debe a que en el mundo los eventos suceden en sí mismos, y pueden ser muchas las ciencias que ayuden a comprenderlos. Así, un fenómeno económico no puede conocerse sólo desde la matemática, sino que también es necesaria una perspectiva histórica y sociológica. Un desastre natural no se comprende sólo desde la ecología, también es importante una mirada política… Un descubrimiento o producción científica no se explica sólo desde la genialidad individual, también es relevante el aporte del pensamiento creativo de muchas personas.
En el siguiente artículo se discute cómo podría entenderse un proceso creativo donde muchos participan, y se integra al debate el papel de las redes sociales en esta construcción del conocimiento y el lugar crítico que asume el autor o dueño de una idea.
LA NACIÓN. Fernanda Sánchez: De lo individual a lo colectivo